El Servicio Penitenciario Federal endureció las condiciones de visita para los internos de alto riesgo, luego de comprobar que las utilizaban para coordinar movimientos criminales.
Julián Curi, subsecretario de Asuntos Penitenciarios de la Nación, explicó en LT10 que “venimos haciendo una evaluación del programa de internos de alto riesgo”, un proceso que se realiza cada seis meses. Durante el primer período, se ajustaron las comunicaciones telefónicas, y en esta etapa se modificó el régimen de visitas.
“El programa lo evaluamos en relación con las formas que tienen las distintas organizaciones criminales de actuar”, señaló Curi. En este sentido, explicó que, al restringir los horarios de llamadas, los internos comenzaron a transmitir órdenes a través de sus familiares durante las visitas.
Ante esta situación, se implementaron nuevas medidas. Ahora se limitará la cantidad de familiares autorizados para ingresar, se prohibirá el contacto físico mediante la instalación de un blindex, las visitas no podrán durar más de una hora y se verificará si los visitantes están involucrados en alguna causa penal.
Curi también reveló que ya hay 10 familiares de internos de alto riesgo detenidos por estar vinculados con la transmisión de órdenes a organizaciones criminales, lo que motivó el refuerzo de estas restricciones.