Un nuevo socavón se originó en barrio Mariano Comas, una zona afectada por los hundimientos. En este caso, el pozo está en calle Cándido Pujato y Urquiza.
La rajadura del asfalto combinada con la acción del agua, estancada y de lluvia, fueron erosionando el pavimento hasta provocar el socavón actual.
Marcelo, vecino del lugar, comentó al móvil de LT10 que en principio había un hueco de solo 10 centímetros y algunas fisuras "hoy ya tiene más de 60".
El agravante, según señaló, es que por debajo del hormigón "no se ve hasta donde se extiende al agujero". Ese detalle preocupa a los vecinos que no alcanzan a dimensionar el daño y temen que el hundimiento sea cada vez más profundo.
Además, hay una placa de hormigón que quedó en el aire, sin sostén. Esto alerta a los vecinos que piden que su reclamo sea atendido antes de una posible caída.
