El año pasado se produjo el regreso de Carolina “Pata” Alberto al ambiente de la Asociación Santafesina. Banco Provincial apostó a potenciar a sus juveniles y el que golpeó su puerta para trabajar con Sexta y Séptima división en busca de una buena base, una buena estructura en todo aspecto. El objetivo principal es el de formar jugadoras que representen el futuro y se pueda recurrir como opciones de recambio.
De esta manera, se apunta a obtener logros deportivos y posicionarse como uno de los mejores clubes formadores. Carolina Alberto destacó el sentido de pertenencia muy fuerte en la institución. “Banco siempre tuvo su mística. Siempre fue un equipo que desde observar la Primera, se sigue lineamientos para las inferiores. Es un plantel que entrena mucho. Me encontré con un grupo que reúne mucho compromiso desde el nivel de asistencia a las ganas de superarse. Es un aspecto que se viene transmitiendo desde los planteles superiores y las chicas lo notan”.
La responsable técnica explicó el momento personal cuando le llegó esta propuesta. “Hacía mucho tiempo que no entrenaba inferiores. Fue un desafío personal volver a meterme en el ruedo. Llegué a un club donde me conocían las jugadoras más grandes pero las más pequeñas no. Tuve que ensamblarme de lleno y el resultado fue muy positivo. Es algo que me apasiona. Y se le sumó la conquista del Regional Sub-14 en Esperanza del año pasado donde compartimos mucho tiempo y posibilitó aún más mi inserción. Aunque los grupos siempre acompañaron y es muy importante. Este año es de transición pero hasta ahora mi etapa en Banco me deja muy conforme”.
“Pata” destacó la meta de desarrollar un perfil idóneo. “Hace un tiempo que diagramamos entrenar con los planteles de Sexta y Séptima ya armados para la próxima temporada. Tratamos de que las chicas sigan entrenando, apostar a la técnica individual y que las categorías sigan una línea y un orden a partir del mismo plan de trabajo de la Primera. Las mayores son referencia y espero que sea así también para las inferiores para disponer de una proyección de acá a 4/5 años y estén jugando en el plantel superior”.
En Banco siempre hay responsabilidades asumidas. “Me gusta trabajar estas edades. Es muy diferente. Es un ir conociéndonos constantemente. Acá se siguió entrenando, más allá de cuando no se pudo por la pandemia. Con eso estoy gratamente sorprendida. Siempre practicamos tres veces por semana desde que nos habilitaron. Es muy raro que falte alguna. Las edades son difíciles pero se dejan encaminar a lo que uno pretende de ellas. Esa es la parte más linda”, afirmó Alberto.
Desarrollo a futuro
“Hablamos constantemente con José Benítez, entrenador de Primera. Tras 10 años sin entrenar inferiores, las cosas cambian. Hay jugadoras de Sub-16 que ya podrían estar jugando en Primera. Tratamos de seguir de a poco lineamientos que nos permitan igualarnos al plantel superior cuando lleguen. Brindarles las herramientas técnicas y tácticas de situaciones de juego para que ellas las incorporen y puedan utilizarlas”, manifestó la ex DT de Ateneo.
Le entrenadora centró sus conceptos en torno a la formación. “La parte más importante son los valores. Siempre les digo que si vamos a ganar es porque entrenamos, porque jugamos mejor. Apuesto a eso y nos tenemos que diferenciar por redoblar esfuerzos, por asimilar y aprender de las derrotas. Es lo más difícil y fundamental, sobre todo en inferiores. Si se aprende en el momento justo, el éxito cuando llegue a la máxima categoría está asegurado”.
A su vez, la responsable de los planteles de Sexta y Séptima de Banco apunta a conseguir los mejores talentos. “Lo que hay que tratar de hacer con las que son muy buenas es entrenarlas y permitir que crezcan, sin frenarlas. Exigirlas e ir incorporándolas al plantel superior motivándolas, de hacerles ver que están cerca como para que no se relajen y sigan. Lo más difícil es la otra clase de jugadora, donde se trabaja para hacerles ganar confianza de que se puede llegar lejos y mejorar”.
Una profunda inversión
“Pata” focaliza en la evolución deportiva desde las bases. “En Banco siempre charlamos con los otros cuerpos técnicos que tenemos que hacer hincapié en las infantiles e inferiores. Un club que se olvida o que no se centra en su semillero, a corto o largo plazo está complicado. Lo que no se aprende en determinadas categorías, no es que se recupera con el tiempo. Ya el año pasado y este también venimos hablando para fortalecer a las más chiquitas en cantidad y calidad mediante gente que esté a la altura para ese trabajo. Eso nos permitirá conseguir varios logros”.
Además, puntualizó en la constante apuesta por el trabajo de los juveniles. “El Sub-16 va ser todo un desafío. Con ellas vengo trabajando ya desde el año pasado. Pero aún mayor será el Sub-14 que es un grupo totalmente nuevo. Ahí voy a focalizarme a pleno. Me tocó enfrentar en Sub-16 y Sub-14 a rivales como SFRC y Estudiantes de Paraná donde se vio un nivel mucho mejor e interesante que en otras categorías cuesta verlo. Hay que continuar trabajando arduamente en inferiores. Ahí está el bonus de Santa Fe que se notó en los buenos seleccionados que se formaron con grandes resultados”.
Po último, destacó la comunión de todas las partes y acompaña a los planteles de las “kresteras”. “Es una pena que este año no se haya jugado la Liga. Será una gran experiencia para el club y más aún jugarla los próximos años. Además, las jugadoras más pequeñas sintieron el campeonato que se consiguió el año pasado en Primera y marca una dirección. Lo difícil no es llegar, sino mantenerse. Ahí implica el doble esfuerzo de todos en sostener al club en lo más alto”, aseguró Alberto.