Luego de muchas especulaciones sobre el futuro, la federación que nuclea a Sudáfrica, Australia, Nueva Zelanda y Argentina dejó en claro que no hay riesgos de disolución a pesar de lo planteado por la unión kiwi, una competencia de franquicias sin sudafricanos ni argentinos, el último viernes.
"Las uniones siguen comprometidas con el futuro a largo plazo como una empresa conjunta", dijo Marinos, quien ratificó lo que Marcelo Rodríguez, presidente de la UAR, había confirmado hace unas semanas: Jaguares no volverá a competir en este 2020.
"Desafortunadamente, la pandemia ha sido particularmente dura para nuestros socios en Argentina, ya que el tamaño y la duración de la cuarentena ha significado que no puedan jugar en ninguna competencia nacional de Súper Rugby este año", dijo en referencia al Aotearoa, el modelo australiano y el que se plenea en Sudáfrica.
"Todos reconocemos los desafíos actuales que enfrentamos al tratar de resolver cualquier posible estructura de competencia de Super Rugby que avance en el entorno de la pandemia, sin embargo, la reestructuración de Super Rugby a través de competencias reformateadas no significa el desmantelamiento de SANZAAR", agregó.
Todavía no está claro cómo el formato del torneo se verá afectado a futuro, teniendo en cuenta los planteos hechos de manera oficial por Nueva Zelanda este viernes.