Una noche violenta se vivió en la guardia del hospital José María Cullen con varios ingresos entre ellos dos heridos de arma de fuego. Pero promediando la madrugada se dio un hecho grave tras el ingreso de un adolescente de 17 años que fue trasladado al nosocomio tras una importante ingesta de cocaína. Según se pudo saber el hombre agredió con golpes de puños y patadas a un enfermero que trabaja en la guardia del hospital.
La denuncia policial explica que el hecho ocurrió dentro del centro de salud tras la primera atención en el shockroom en el momento que el paciente iba a ser trasladado a otra habitación para recuperarse de un importante consumo de cocaína. Es en ese momento cuando el joven procede a desconectar su suero y tras una discusión con el personal del efector comenzó a agredir a uno de los enfermeros cayendo al piso y siguiendo la gresca en ese lugar mientras médicos y familiares intentaban pararlo
El hecho fue noticiado por el personal del Cullen y tras la denuncia actuó personal del 911 que arribó al lugar y controló al menor mientras esperaban que se pase el ataque de ira.
En diálogo con LT10, Hernán Malatinni, subdirector del Hospital, explicó que el paciente ingresó con "un cuadro de excitación psicomotriz". Se lo asistió correctamente como se hace en estos casos de abusos de sustancias. Se lo deja en shockroom hasta que baje el nivel de agresión pero en un momento se desató una situación que se tornó incontrolable y es cuando este paciente agrede al personal del nosocomio y en particular a un enfermero a quien le pega golpes de puños y patadas.
Este tipo de sucesos es una constante en la guardia del hospital Cullen y por esta razón médicos y enfermeros vienen solicitando a las autoridades más seguridad en el nosocomio y mejores condiciones edilicias.