Antonella Olmedo tenía 20 años, trabajaba en la panadería Franco Colella ubicada en Juan José Paso y 4 de enero. En septiembre de 2015 se produjo una explosión de gas que le provocó quemaduras en el más del 65% de su cuerpo y posteriormente su muerte.
En abril, se debía realizar la audiencia para elevar la causa a juicio oral, que se postergó porque en ese momento apareció el abogado que patrocinaba a otra joven herida, el doctor Federico Baridón, quien solicitó convertirse también en querellante de la causa.
La presentación del letrado hizo que la audiencia preliminar se suspenda hasta nuevo aviso. En la misma, el fiscal del caso, Andrés Marchi, y el abogado querellante de la madre de la víctima, Leandro Corti, iban a presentar las pruebas para ir a juicio; mientras que los defensores de los imputados (Dres. Martín Risso Patrón, Néstor Oroño y Sergio Martín) tenían previsto solicitar al juez Héctor Candioti una probation y no ir a proceso oral. En tanto, Ignacio Alfonso Garrone, que representa a otro imputado, había anticipado que solicitaría el sobreseimiento.
Las novedades
Hoy se conoció que la Justicia aceptó como querellante al abogado defensor de María José, una joven que se encontraba en un local cercano a la panadería cuando se produjo la explosión y sufrió heridas de consideración a raíz del siniestro.
De todos modos, podrán participar del juicio pero sin posibilidad de presentar acusación. "Nos interesaría participar de la acusación", le dijo al móvil de LT10 Baridón.
El abogado, precisó que María José "se encontraba comprando en un kiosco de al lado de la panadería con unas amigas. Cuando se produce la explosión, la onda expansiva la arroja hacia la vereda y se le cae un cartel encima. El cartel le partió la rodilla provocándole lesiones crónicas".
Los hechos
Antonella Olmedo murió el martes 15 de septiembre a raíz de una falla multiorgánica producida por las quemaduras que sufrió en el 65 por ciento de su cuerpo. La explosión que le produjo las lesiones ocurrió entre las 19:30 y las 20:15 del domingo 13 de septiembre como consecuencia de una pérdida de gas natural –que habría sido informada en febrero y en mayo por otras empleadas a la encargada de la empresa– de una boca de alimentación sin artefacto conectado y sin tapón epoxi obturador de seguridad. El gas produjo la ignción al entrar en contacto con una chispa que se produjo cuando la joven fallecida desenchufó una lámpara eléctrica mata insectos.
La deflagración generó la caída del cielorraso, rotura de vidrios, desprendimiento de las puertas de ingreso a la panadería y a los dos locales contiguos, afectación de enseres y mercaderías y corrimiento de los muebles de su lugar.
Además del fallecimiento de Olmedo, otras seis personas que estaban en el quiosco ubicado en el local número 3 y en la vía pública sufrieron lesiones de distinta consideración.