En una sesión prevista para las 17 horas, la Cámara de Diputados podría aprobar finalmente el aumento en el gravamen a la cerveza. Desde el sector cervecero santafesino, todavía se guarda una pequeña esperanza de que esto no suceda, esperando que los legisladores por Santa Fe defiendan los intereses de la provincia en esta cuestión.
El oficialismo espera otorgarle media sanción a esta iniciativa enmarcada dentro del paquete de cambios impositivos que iban a ser tratados ayer por la noche luego de la reforma previsional y tuvieron que ser suspendidos luego la maratónica sesión, hasta la tarde de hoy.
Recordemos que el Gobierno dio marcha atrás con la suba de impuestos internos a los vinos y espumantes, fuertemente resistido por las provincias productoras y lo mismo sucedió con la suba de impuestos internos a las gaseosas.
Quienes no tuvieron suerte, hasta ahora, fueron los cerveceros. El proyecto eleva el gravamen a las cervezas al 17 por ciento, aunque eso podría caer en la sesión de hoy.
En diálogo con Todo Pasa, el gerente de asuntos corporativos de la cervecería Santa Fe, Juan Pablo Barrale, comentó que esto le preocupa ya que quiere decir que "se legisla de acuerdo a intereses particulares" que perjudican al sistema productivo.
El empresario declaró: "quedamos en una posición discriminada con respecto a otras bebidas que, para competir, necesitan no pagar impuestos y que los demás paguen. Lo lamentable es que esto esté avalando por el Congreso de la Nación."
El aumento en el gravamen a la cerveza impactaría directamente en un aumento en su precio, entre el 7% y el 10%, dependiendo de las marcas y el contexto del mercado. Es un aumento artificial que tenemos que hacer, obligados por no poder soportar los costos", manifestó.
"El 60% de lo que una persona paga cuando compra una cerveza, se va al Estado", dijo Barrale que calificó estos porcentajes como "una locura".
"Esto no es gratuito para la industria; confiamos en que los diputados van a hacer oír su voz", expresó.