El Concejo Municipal de Gálvez rechazó un veto del intendente y dejó firme una ordenanza que dispone el congelamiento de las vacantes para 2017, ya que la ciudad se encuentra en emergencia económica.
Pero la aprobación no fue en paz. Según cuenta Galvez Hoy, “un grupo de manifestantes que se encontraba en el lugar, con bombos y redoblantes” logró sortear el operativo policial ya desplegado, ingresó a la sala de la Presidencia (donde se desarrollaba la reunión) y provocó serios destrozos. Hubo mobiliario y aberturas dañadas, personas agredidas con gas pimienta y dos ediles debieron ser auxiliados.
Por LT10, el concejal Oscar San Martino, contó que la declaración de la emergencia se debe a que “la situación del Municipio es catastrófica”, y justificó el congelamiento de las vacantes: “también es una manera de cuidar al que está laburando hoy”.
Asimismo, reveló que “ahora saltó a la luz que había un acuerdo entre la Intendencia y el sindicato para el ingreso de nuevo personal, entonces la cúpula del sindicato, con la parte más pesada, empezó a presionar”.
Postura oficial
El secretario de Regiones, Municipios y Comunas de la Provincia, Carlos Torres, manifestó su sorpresa “por esta actitud delincuencial, totalmente antidemocrática y agresiva”.
“Lo único que hicieron los concejales fue cumplir con su trabajo y sancionar una ordenanza, que puede gustar o no pero está dentro de las libertades democráticas”, argumentó.
Torres pidió que actúe la Justicia para “sancionar como corresponde a los culpables de los desmanes” y aseguró que “la Provincia está a disposición”, aunque negó intención alguna de intervenir la ciudad de Gálvez.