A pesar de ser el puntero del campeonato y haber ganado tres clásicos en fila (San Lorenzo, Racing y River), Boca no tiene motivos para sonreírle al final del 2016 y, más que nada, al comienzo del 2017. Es que el Xeneize, que además sufre por la posible partida de Carlos Tevez al fútbol chino, no participará de ninguna competencia internacional en el próximo año, situación que no sufría desde los años 2010 y 2011. En el 2010 cuando fue comandado por Alfio Basile, Abel Alves, Claudio Borghi y cerró con el interinato de Claudio Pompei. En el 2011, con la llegada de Julio Falcioni, pudo enderezar el rumbo retornando en el siguiente año al plano Conmebol.
Pese a ser el plantel del fútbol argentino de mayor presupuesto, el equipo de los mellizos Barros Schelotto estará ajeno a los vuelos, situación más que dolorosa para y por la historia del club. Además hay que sumarle que es el único equipo grande que se queda con las manos vacías, ya que River y San Lorenzo jugarán la Libertadores, mientras que Racing e Independiente disputarán la Copa Sudamericana.