Diego Milito tuvo su homenaje en la cancha de Racing, en un partido en el que estuvieron los campeones de la Academia en 2001 y 2014, más los amigos del delantero. El Cilindro de Avellaneda se visitió de fiesta para distinguir a uno de sus grandes ídolos.
Primero, los recordados campeones de 2001 de la mano de Carlos Merlo se enfrentaron a los invitados y, luego, fue el turno de los consagrados hace un par de años bajo la conducción de Diego Cocca.
Fue 3-1 para la Academia, aunque lógicamente el resultado fue una anécdota. Diego metió dos y el tercero lo hizo su hijo, Leandro, que le puso el broche al encuentro.
"Gracias", expresó el hoy ya exdelantero, visiblemente emocionado. "Me voy del Cilindro con el sueño realizado, que es irme con esta camiseta", agregó. Luego llegó el turno de la vuelta olímpica y el abrazo con cada uno de los hinchas que asistió al estadio de Avellaneda. La emoción ya no la podía ocultar.
El gran protagonista de la tarde pisó el césped que lo vio nacer futbolísticamente y donde también dio sus últimos pasos hace seis meses. Además, con la particularidad de haber sido parte de los dos únicos títulos a nivel local que el club consiguió en los últimos 50 años.
El debut de Milito fue el 11 de diciembre de 1999 en el empate 3-3 ante Unión, mientras que su retiro se dio el 21 de mayo en la victoria sobre Temperley por 2-0. En el medio pasó por Zaragoza, de España, e Inter y Genoa, de Italia.
En el Neroazzurro logró un Scudetto (2010), dos Copa Italia (2010 y 2011), una Supercopa de Italia (2010), una Liga de Campeones de Europa (2010) y un Mundial de Clubes (2010). En Racing salió campeón en el Torneo Apertura 2001 y el certamen disputado en 2014.
Con la Selección Argentina jugó el Mundial de Sudáfrica 2010 y las Copa América de Venezuela 2007 y Argentina 2011. A lo largo de su carrera, tuvo la oportunidad de jugar 630 partidos y convertir 259 goles.
Entre las figuras para su partido homenaje estuvieron, entre otros, el arquero italiano Francesco Toldo, Walter Samuel, Nicolás Burdisso, Javier Zanetti y Roberto Ayala.