Un caso extraño en el fútbol argentino: una cancha fue suspendida por estar torcida. La AFA descubrió el imperfecto, que estuvo durante 30 años de la misma manera, y obligó al club Liniers a modificar el error.
Cabe aclarar que las medidas del campo de juego son reglamentarias, pero el césped en el Juan Antonio Arias está muy fuera de encuadre. Es por eso que, después de algunas advertencias, la Asociación del Fútbol Argentino decidió clausurar el estadio hasta que se corrija esto.
