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El juego arrancó con un parcial 5-0 que era respondido con un parcial de 7 a 0 por la visita. El trámite se mostraba igual al del miércoles en cuanto al comienzo de rachas. Thomas era desnivelador absoluto en el tatengue, mientras que Melo asomaba como el arma mas firme en los patagónicos. Cuando promediaba el juego el negro Farías con un par de bombas devolvía tranquilidad a los tatengues. El partido en el arranque, a diferencia del pasado, se mostraba con ofensivas firmes y defensas abiertas. El primer cuarto finalizó 20 a 17 para los anfitriones.

En el segundo cuarto (y hasta el final) la intensidad defensiva afloró en el Malvicino. Da cuanta de ello que con seis jugados tan solo se habían convertido seis puntos por bandos. Ambos desplegaban persecución individual. Unión probó con doble base pero no dio resultados. El juego se ponía áspero bajo las tablas y se hacía complicado rotar la bola para ambos equipos. Sobre el final del cuarto de la mano de Farías y Gandoy el Tate se puso seis arriba (emulando la máxima conseguida en el primer cuarto hasta entonces. El primer tiempo finalizó por 32 a 27.

En el tercero el Tate apareció con todo. Cosolito en defensa marcaba el ritmo y también convertía. De Apoco se fue escapando en la pizarra. Cuando promediaba el cuarto logró una cifra de diez a su favor (46-36) y la gente deliraba en las tribunas. Los casi 2.500 corazones rojiblancos se ilusionaban con estar entre los ocho mejores del pais y con dos ascensos por disputar, algo impensado por muchos al comienzo de la temporada y ni hablar 3 o 4 años atrás cuando el equipo jugaba el Federativo C. Sobre el final Cosolito se ganaba al público local y mostraba todo su repertorio (un par de volcadas en transición y un tiro de tres). El tercero finalizó por diez (53-43).

El último cuarto fue el peor de Unión. De entrada estuvo muy trabado en ofensiva. Perdió a dos piezas claves (Reinick en defensa y Cosolito en ambos tableros). Si bien al inicio llegó a sacar trece unidades de distancia, rápidamente los de Miravet descontaban para ponerse a un par de bolas. Sobre el final, un par de errores ofensivos del Tate posibilitaron el rival empate el juego en 61. El dueño de casa no encestó en su ofensiva y en la visita, cuando sonaba la chicharra Wilkerson entre tres jugadores a cuatro metros sentenció el pleito (61-63) y las ilusiones tatengues de pasar de ronda ante su gente.

Ahora Unión deberá viajar, nuevamente, hacia Trelew (Chubut) para intentar ganar en el juego decisorio su boleto a cuartos de final. La distancia será un escollo que si bien juega para ambos, el Tate en caso de ganar y pasar de ronda le ocasionará problemas a futuro ya que el viernes próximo (de pasar a octavos) deberá jugar en condición de visitante.

SINTESIS:

UNION 61: Gandoy 8, Farías 14, Cosolito 10 (X), Thomas 17, Reinick 3 (X) (FI); Gamazo 8, Vildoza 0, Banegas 1. DT: Siemienzuck

HURACAN (T) 63: Sartorelli 3, Melo 9, Dentis 4, Ravina 2, Wilderson 10 (FI); Moreno 7, Gareis 2, Maranguello 11, Figueredo. DT: Miravet.

Parciales: 20-17/ 32-27 (12-10)/ 53-43 (21-16)/ 61-63 (08-20).

Estadio: Ángel Malvicino.