Hoy

Lunes 10 de Febrero de 2014 - 20:55 hs

El film argentino \\"Ciencias Naturales\\" se exhibe mañana en Berlín

 Todos los guiones que escribí tratan de lo mismo, de relaciones familiares y de conflictos generacionales. El vínculo entre padres e hijos viene siendo mi tema desde hace mucho tiempo y todo lo que hago va direccionado hacia eso”, afirmó Lucchesi, cuyo corto “Distancias” -que también habla del abandono paterno- fue premiado como mejor filme en el Festival de Biarritz, Francia.

Su primer largometraje, que también cuenta con las actuaciones de Alvin Astorga, Sergio Boris y Arturo Goetz, será exhibido mañana martes, el miércoles y el jueves próximos en la sección Generation de la Berlinale, dedicada específicamente a temas y problemáticas juveniles, donde hoy será proyectado también otro filme argentino, “Atlántida”, ópera prima de la cordobesa Inés Barrionuevo.

“Es mi primera película y es muy importante estar en Berlín, todavía no termino de caer y siento que es como un reconocimiento muy valioso, más allá de lo que pase. Ya estar en el festival es muy gratificante, porque esta película fue hecha con muchos riesgos, sin apoyo, y por suerte todo salió bien”, afirmó Lucchesi en una entrevista con Télam a pocos metros del Berlinale Palast, el centro neurálgico del festival.

Ganadora del premio de distribución de la sección Primer Corte de la última edición de Ventana Sur, la película transcurre en las Altas Cumbres cordobesas, donde una niña (sorpredente Hertzog, quien ya había protagonizado “El premio”, de Paula Marcovitch) escapa de la escuela rural donde vive con el objetivo de buscar a su padre y conocer su verdadera identidad.

"El vínculo entre padres e hijos viene siendo mi tema desde hace mucho tiempo y todo lo que hago va direccionado hacia eso”
Matías Lucchesi A pesar del frío intenso, de la oposición de su madre y de la directora de la escuela, su maestra de Ciencias Naturales (Barrientos), con quien entablan una relación de respeto y profunda amistad, la ayudará a entablar un viaje de iniciación y crecimiento interior, para el cual sólo tiene una pequeña chapita oxidada como pista para encontrar a su padre.

Sobre sus motivaciones, Lucchesi señaló que le interesaba mostrar “la vitalidad de alguien que hace todo por llevar adelante lo que el cuerpo le pide. Ella empieza a transformarse en mujer y algo internamente le demanda saber de dónde viene”.

“Esa es una demanda interna muy poderosa que no se puede apagar con razonamientos. A ella no se la podía convencer de ningún modo de que abandonara su objetivo, porque el impulso era mucho más fuerte que cualquier explicación racional”, precisó.

“Este es el primer papel protagónico en el cine de Paola Barientos, que estaba embarazada cuando le acerqué el guión y sin embargo le gustó mucho y se sumó al proyecto. Yo pensé que no lo haría, porque a todo nivel era muy díficil y tuvo que soportar la ola polar de julio de 2013 en una escuela rural, con un solo baño para 35 personas”, recordó el director.

Y añadió: “Es increíble lo que hizo, su entrega y profesionalismo. Vivíamos rodeados de una hostilidad total, en medio de la montaña, sin nada y con un solo baño para todos, y ella siempre tuvo la mejor actitud y predisposición”.

En relación a su trabajo actoral, Lucchesi sostuvo que “Paola aportó mucho, sobre todo por la relación que estableció con Paula. Para mi era muy importante que se conocieran desde antes, eso fue algo clave, porque armaron una relación desde el primer día de ensayo que hizo que la cosa funcionara. Había un lindo vínculo entre ellas, se querían”.

“Además -agregó- no había que dirigirla demasiado, entendió muy bien el personaje y para mi era la sensación de dirigir a Messi, no había mucho que decirle. Me sentí muy apoyado por ella, porque me hacía planteos y sugerencias que ayudaron mucho a la película”.

Sobre la génesis del filme, Lucchesi sostuvo que “surgió en base a una imagen simple, cuando estuve unos días en Córdoba y vi algo que me quedó clavado en la cabeza: una nenita con su madre esperando algo en el medio de la montaña con muchísimo viento helado”.

“A partir de esa imagen se me armó la historia de una nena que busca a su padre, al que no conoce. Y luego fueron surgiendo otros temas a partir de otras imágenes que fueron apareciendo. Las condiciones de vida son muy difíciles allí y ver a todos esos nenes que viven en la escuela, todo eso me inspiró para ir elaborando una historia”, rememoró.

“Hacer mi primera película en Córdoba para mi era un deseo”, dijo Lucchesi, quien nació en esa provincia y visitaba asiduamente la zona de las Altas Cumbres durante su adolescencia.

“Además -abundó- confiaba mucho en el muy buen nivel de los técnicos cordobeses, que se nota en varias películas que se hicieron allí en los últimos años”.

Actualmente Lucchesi piensa y escribe junto a Gonzalo Salaya su próximo largometraje, “El Pampero”, para el que espera contar con la actuación protagónica de Julio Chávez, y que -como no podía ser de otra manera- “indaga en la relación entre un padre y su hijo, donde el mayor tiene que enfrentar todo lo que hizo mal en su vida para redimirse con el niño”.

Fuente: Telam