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A pesar de la resolución que dispone congelar los precios de los combustibles hasta las elecciones y que afectará a toda la industria petrolera, la conducción de YPF confirmó que continuará con su política de precios y que podrá aplicar futuros aumentos. En un comunicado, la firma que dirige Miguel Galuccio señaló que “mantendrá su política de precios de acuerdo con su conveniencia y que esta decisión oficial no interfiere con el plan de comercialización planificado para este año”. La empresa explicó que “la resolución dispone topes máximos para los precios de los combustibles líquidos durante los próximos seis meses, aunque no fija los precios que cada petrolera debe disponer. En ese sentido, YPF señala que sus precios son los más bajos del mercado en todo el país con diferencias muy significativas con la competencia”.

Pero para las fuentes del mercado, la posición de la estatizada empresa se vería afectada de todas formas. “Por un lado, YPF tiene los precios más bajos del mercado y es cierto que en algunas zonas tiene un amplio margen para seguir aumentando. Pero, en la Capital Federal, por ejemplo, la posibilidad que tiene para subir valores es muy pequeña y además de todas formas se le pondrá un techo al aumento que planee realizar”, contempló una fuente de la industria.

Al mismo tiempo, si bien muchos interpretaron la decisión de ayer como una ayuda a YPF para paliar las pérdidas en la producción que generará el siniestro que sufrió en su refinería de La Plata (la mayor del país), aseguran que el auxilio será relativo. “Sin dudas que la medida podría favorecer a YPF en el sentido que podría desplazar la demanda de combustibles hacia otras petroleras y de esta forma alivianar a la empresa que tendrá pérdida irreparables a raíz del incendio. Pero también es cierto que ese hecho implicará menores ventas para YPF; ergo, menores ingresos”.

Otra fuente consultada explicó que “la decisión afecta a YPF en forma considerable ya que las importaciones que realice serán con pérdida variable pese a las exenciones impositivas”. Además, consideró, “el congelamiento de precios de combustibles afecta la emisión de deuda realizada por YPF con modalidad dollar link, en momentos en que la devaluación oficial corre al 20% anualizado”.

De un modo u otro, YPF –que fue la única petrolera que hasta ahora no había modificado sus valores en lo que va del año–, aceleraría el aumento que podría llegar la semana que viene a los surtidores. Por el incidente en la refinería de Ensenada, la petrolera definió la importación de nafta y gasoil para atender su merma en la producción. Según confirmó Galuccio las compras al exterior serán por un 60% más de lo previsto y le costarán a YPF unos u$s 400 millones extra. En los próximos días llegaría al país el primer embarque con cargamento que adquirió la semana pasada de urgencia.