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Por primera vez el Gobierno ayer dio indicios de que está dispuesto a modificar el techo del 20% que pretendía imponer en las subas salariales de este año. El que lo planteó fue el ministro de Educación nacional, Alberto Sileoni, quien encabeza la discusión paritaria en la que se fijará el nuevo piso salarial de los maestros. En declaraciones a la prensa, el funcionario aseguró que aún sigue sin definirse la nueva oferta salarial que se les hará a los gremios docentes. Pero enseguida agregó: “Por supuesto que será menor del 25 por ciento”.

Las palabras del ministro tuvieron buena recepción en los sindicatos docentes. “Lo que está reconociendo es que cualquier propuesta inferior al 20% es directamente inviable”, se entusiasmó anoche un sindicalista que participa de la discusión paritaria nacional.

La administración K buscó hasta ahora que la pauta salarial de 2013 fuese del 20%. Pero la pretensión oficial chocó contra la fuerte resistencia de todas las centrales sindicales, aun de las kirchneristas.

Los cinco gremios que participan de la paritaria docente reclamaron en el inicio de las negociaciones una suba del 30%, lo que llevaría el sueldo de un maestro de grado sin antigüedad 2.800 pesos a 3.650 pesos. El Gobierno contraofertó una suba del 17%, que fue rechazada por los sindicatos.

Pero el jueves pasado en conversaciones informales con los gremios, Sileoni mejoró la oferta: ofreció una suba del 19,7%, con lo que el salario de los maestros subiría a $ 3.351. Esa propuesta tampoco fue aceptada por los sindicatos.

En declaraciones al diario El Tribuno de Salta, Sileoni dijo que “el piso hoy está en $ 2.800 y por supuesto va a traspasar los $ 3.000. Pero es un piso que ordena el salario mínimo del docente maestro sin antigüedad jornada simple. Es un cargo testigo, lo cobra el 6,7, 8 por ciento de la Argentina. El resto gana más”.

Consultado sobre si creía que los docentes podrían ir al paro en caso de que no se cumpla con sus reclamos, el ministro contestó: “Puede ocurrir, pero son tensiones con las que tenemos que convivir en democracia. Está claro que una demanda del 30 por ciento es irreal, no está en línea con lo que ocurre en la economía argentina”.

Se espera que el miércoles el ministro y los gremios retomen las negociaciones. El rumor que circulaba ayer en el ambiente sindical era que el Gobierno ofrecería una mejora del 22%, que llevaría el salario de los docentes a $3.416. Si eso ocurriese, la Casa Rosada estaría fijando un nuevo piso para la discusión paritaria de 2013.

¿Aceptarán los gremios docentes esa oferta? Jorge Dobal, secretario general de la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), dijo ayer a Clarín que una “suma menor al 25% podría ser aceptable dependiendo de los condimentos. Por ejemplo, si el acuerdo empieza a regir el 1° de febrero en vez del 1° de marzo”.

El año pasado, el Gobierno y los gremios no llegaron a un acuerdo y el salario docente se fijó por decreto. Un dirigente de CTERA, el principal gremio docente del país, reconoció ayer que “es posible que finalmente otra vez no haya acuerdo. Es mejor no acordar que firmar un mal acuerdo”. En esa caso, peligraría el comienzo de clases en algunos distritos del país.