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En un plenario llevado a cabo en la sede partidaria, Claudio Choco Díaz fue elegido presidente del Comité Departamental Rosario, sucediendo a Julio Genesini. El dirigente radical convocó a todos los sectores del radicalismo a seguir construyendo un partido fuerte y una alternativa de poder, “ante tanto autoritarismo”, que vive nuestro país.

Díaz ratificó además la pertenencia del radicalismo al Frente Progresista, con la consigna de “hacer valer aún más la voz radical”.

La mesa de conducción del Comité Departamental quedó conformada con Claudio "Choco" Diaz como presidente, Rubén Rosa y Martín Malaponte como vices, Domingo "Polaco" Basilio en el puesto de secretario y Javier Gonzalez de tesorero.

En el plenario de asunción, colmado por militantes y dirigentes, estuvieron presentes Jacinto Speranza, presidente de la Convención provincial y Eduardo Galaretto, presidente del Comité Provincia de la Unión Cívica Radical.

En su discurso inaugural, Díaz agradeció a todos los sectores partidarios que hicieron posible la conformación de la mesa, y alabó la gestión de su antecesor, Julio Genesini, que llevó adelante un proceso de reconstrucción institucional.

Díaz dejó en claro que “tenemos desafíos por delante. Debemos trabajar en la formación de nuestros cuadros políticos, seguir con atención las políticas públicas de nuestra ciudad, fortalecernos como herramienta de un frente electoral. En este aspecto, todavía falta mejorar, pero para que nuestra voz valga mas, debemos institucionalizarnos aún más hacia dentro del partido”.

Díaz apeló a la historia del radicalismo y a sus grandes hombres, para afrontar los tiempos venideros: “Por nuestra historia, y por los grandes hombres, como Yrigoyen, Alem, Lebensohn, Larralde, Balbín Illía, Alfonsín, vamos a asumir los nuevos desafíos. Nos vamos hacer fuertes, vamos a reclamar nuestros lugares como radicales, vamos a saber construir en el Frente, pero desde nuestra profunda identidad radical. Mucho hicimos por este país, y ahora estamos convocados para seguir haciéndolo”.

También convocó a los jóvenes y criticó duramente al kirncherismo, en su tinte autoritario: “Debemos analizar la década de los sesenta para que no nos roben el discurso. Analizar la década de los setenta para desguazar ese falso relato que tratan de imponer desde el autoritarismo del kirchnerismo actual. Porque hubo otra juventud, la juventud radical, que no apoyó la lucha armada. Que supo ver en aquel momento, con la guía de Ricardo Balbín y la figura de Raúl Alfonsín, que otra vía, progresista, democrática y pacífica era posible. Ahora los K, reivindican a un odontólogo conservador de San Andrés de Giles, como si fuera el gran revolucionario argentino, cuyo único mérito fue ser un chupamedias de Eva y del General”.