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 Por orden del intendente de la ciudad de San Miguel de Tucumán, Domingo Amaya, 14 agentes de la Dirección de Producción y Saneamiento Ambiental (Dipsa) y dos de Defensa Civil Municipal visitaron ayer uno a uno los 17 puntos que constaban en la denuncia de la titular de la fundación María de los Ángeles Verón, Susana Trimarco.

Desde el lunes, día en que comenzaron la recorrida por las calles del macrocentro de la capital provincial, 12 de los 17 prostíbulos mencionados por Trimarco en su denuncia penal de 2009 fueron clausurados. El resto, fueron visitados por los agentes municipales, pero no encontraron rastros de actividades relacionadas a la prostitución, por lo que se cree que dejaron de funcionar con ese fin.

Según publica hoy el diario La Gaceta, los motivos de cierre fueron variados: falta de habilitación municipal, de documentación técnica y de las condiciones de higiene exigidas por la Dipsa. Además, estos locales no están habilitados como prostíbulos, sino que suelen figurar en los registros municipales como bares, confiterías u hoteles.

Sólo cinco de los 17 locales quedaron exceptuados de clausura, ya sea porque la dirección del lugar señalado no existe -como ocurrió en un caso-, o porque ya no funciona un prostíbulo en el lugar que se denunció, aunque así fuere en otro tiempo.