Rubén Rimoldi asumió como nuevo ministro de Seguridad de la provincia de Santa Fe este miércoles 10 de agosto, luego de que presentara la renuncia al cargo Jorge Lagna.
De esta forma, Rimoldi se convierte en la tercer persona en ocupar este cargo durante la gestión de Omar Perotti, quien durante la jura aseguró que se trataba de una nueva etapa, con menos palabras y más acciones.
En diálogo con LT10, Rimoldi confirmó que hoy tendrá su primer reunión de gabinete en la que conocerá al equipo de trabajo, pero viendo la situación desde afuera, asegura que existe una "idiosincrasia y forma de nuestra provincia, más allá de norte, centro y sur, en materia de seguridad", que marca una gran diferencia entre las ciudades grandes y las chicas. "El grave problema son las grandes ciudades" agregó.
Con respecto a lo que busca en su nueva gestión, explicó que es necesario remontarse al momento en el que funcionaron de la mejor manera, "cuál era la estructura que teníamos, el formulismo en la seguridad". Entonces, en función de esto, "retrotraigamos y empecemos una refuncionalización de la manera como mejor estaba trabajando nuestra institución policial".
Además, aseguró que el gran problema es que no existe un mando unificado y firme. "Son distintas formas, yo no critico como lo hicieron otros ministros, políticas, la situación es que necesitamos un mando unificado, toda la policía necesitamos que estén sentados en una mesa y coordinar un trabajo en conjunto" sostuvo Rimoldi.
"El vecino tiene que entender que la policía necesita todos sus mandos sentados en un misma mesa para un trabajo en conjunto (...) de manera rápida y para dar una respuesta al vecino, tenemos que sentarnos todos en la misma mesa, como lo dijo el gobernador ayer" concluyó.
“La seguridad la hacemos entre todos, pero el vecino tiene que tener una gran confianza en nosotros” sostuvo.
Sobre su perfil, se retiró de la policía a los 48 años y desde entonces hizo una carrera política para la que se capacitó “democráticamente para trabajar en seguridad”.
“Estoy en democracia, soy subordinado al poder político, todas las personas que me conocen saben que mi subordinación es incondicional” declaró. Además, sobre las opiniones, afirmó que no se va a meter.
Por otro lado, Miguel Ángel Oliva, nuevo jefe de la Policía de Santa Fe, en reemplazo de Emilce Chimentti, anticipó que van a “tratar de aplicar una restructuración y reorganización policial, la cual está muy diezmada por muchas dependencias que han sido creadas para distintas funciones hasta poder tomar más efectivos y brindar una mayor presencia”.
En lo personal, afirma que aspira a que la gente vuelva a ver a la policía de la provincia, “que vean nuestros policías, no que pidan que venga Gendarmería, la federal. Ellos tienen que ser un complemento del servicio”.
Por otro lado, aseguró que van a incentivar al personal que está en actividad, “apoyar al que este en los lineamientos del buen policía, y el que no encaje en esos lineamentos, se irá de la institución, lisa y llanamente”.
Además, destacó la importancia de “tener un contacto directo y fluido, y generar un trabajo mancomunado y en conjunto donde la gente se sienta segura”.