El conflicto bélico que se iniciará este año en Europa del Este no se detiene y tiene alcance a territorios cercanos. En materia deportiva, por ejemplo, Estonia tomó una firme postura respecto a su relación con Rusia tras la invasión de Ucrania por parte de éstos.
Tanto es así, que implementó una norma por la que ningún tenista ruso y bielorruso podrá competir en evento oficial alguno, según indica Ubitennis, algo que no solo afecta a numerosos eventos de categoría ITF, sino también al torneo WTA 250 de Tallín, que se disputa del 26 de septiembre al 2 de octubre.
Con Anett Kontaveit (número 2 del ranking mundial) a la cabeza, los locales tienen la chance no solo de ver de cerca una competencia tenística de nivel sino también de seguir de cerca a su mejor exponente en alguna de las ramas del deporte.