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Argentinos sufrió este martes un inesperado tropiezo en La Paternal frente a Nacional, que lo venció 1-0 vengando la derrota que había sufrido en su casa. El Bicho nunca le encontró la vuelta al encuentro como para hacer fuerza para cambiar la historia y, pese a que sigue como líder del Grupo 3 de la Copa Libertadores, ya no tiene invicto y podría ser superado por América, que tiene un partido menos.

En el primer tiempo, al conjunto de Pedro Troglio le costó hacer pie. Matías Cabrera y Facundo Piriz fueron claves para los uruguayos a la hora de ganar el mediocampo, y su conjunto centralizó el balón lejos de las intermitentes intenciones de Christian Sánchez Prette, Sergio Escudero y Franco Niell.

El primero en avisar fue Santiago García con un remate alto, y luego el local respondió con un cabezazo de Santiago Salcedo que controló Leonardo Burián. Hasta que, a los 33 minutos, Nacional concretó lo que insinuaba. García capturó un pelotazo frontal, dejó pagando a un flojo Santiago Gentiletti que intentaba despejar escapando hacia la derecha y definió cruzado y bajo para la emoción charrúa.

Recién cerca del descanso el Bicho ensayó una reacción, pero tanto a Gonzalo Prósperi como a Salcedo les faltó puntería. Lo que siguió en el complemento fue muy tibio para un equipo con la obligación de ser protagonista. Muy pocas veces los hombres de ataque de Argentinos consiguieron asociarse y sus esbozos fueron siempre bien controlados por el atento fondo uruguayo.

Apenas Sánchez Prette, con un tiro que tapó el arquero, y Salcedo desde afuera con un disparo que pasó cerca coquetearon con la igualdad, mientras que del otro lado, donde parecía estar todo dominado, García desperdició otra chance y todo el equipo el ingreso de Marcelo Gallardo, que mostró pinceladas interesantes de su clase pero no encontró asociaciones para inquietar en los últimos metros.

Muy pocos hinchas del Bicho -los más optimistas- habrán llegado entonces ilusionados hasta el final con sacar un punto de esta noche sin luces. En efecto, lo mejor que pudo pasarles a los de Troglio fue que el juez Enrique Osses pitara el final. Hoy no fue el día de Argentinos, que al fin y al cabo sigue en zona de clasificación y, en lo que viene, podrá barajar y dar de nuevo sin demasiada presión.