Un pequeño pueblo ubicado en el corazón de Grecia se convirtió en el atractivo de muchos turistas que deciden frecuentar la zona por un sorprendente hecho: un accidente geográfico que ocasionó que el terreno se hundiera 15 centímetros, lo que provocó la inclinación de una Iglesia en 17 grados.
La Parroquia está ubicada en Ropoto, un pueblo que fue abandonado por el derrumbe y desprendimiento de tierras y piedras.
No solo ocurrió con este edificio, sino con todas las casas a su alrededor. Esto obligó a los 300 habitantes de Ropoto, a abandonar el lugar para siempre y así buscar nuevos rumbos.
Desde abril de 2012 que el pueblo se ha convertido en un lugar turístico y de peregrinación para quienes llegan al lugar y se sorprenden al ver la iglesia inclinada, en donde aprovechan para tomar fotos y captar imágenes.
Dentro de las visitas, dos hombres tomaron imágenes que se hicieron virales en las redes sociales. Se trata de Bob Thissen y Frederik Sempels, quienes se adentraron en la localidad para visitar su iglesia histórica para chequear la inclinación que ya supera a la de la mítica Torre de Pisa ubicada en Italia -la cual presenta una inclinación casi de 4 grados-.