Sucesos - Horror en Santiago

Miércoles 02 de Diciembre de 2020 - 12:55 hs

Un hombre asesinó a puñaladas a su hijo de 3 años mientras dormía

Se investiga si estaba bajo los efectos de sustancias o si tuvo un brote psicótico. No se descarta la hipótesis de una venganza contra la madre del nene. Testigos dicen que el menor recibía brutales golpizas de parte de su padre.

Actualizado: Miércoles 02 de Diciembre de 2020 - 13:43 hs

Un brutal asesinato generó conmoción en Santiago del Estero: un hombre asesinó de 12 cuchillazos a su hijo de tres años mientras dormía.

La tranquilidad que reinaba en barrio Autonomía, en la zona oeste de esa capital, fue interrumpida cerca de las 13, cuando decenas de uniformados en camionetas y motos llegaron a una casa ubicada sobre calle Borges al 600. Los efectivos de la Comisaría Décima habían sido alertados de que en el interior de la propiedad de la familia Torres Murad se había cometido un crimen.

Cuando ingresaron a la casa, hallaron a un sujeto completamente ensangrentado, y en el interior de una de las habitaciones, en el primer piso, un niño que yacía tendido sobre una cama cucheta, sin vida y con el cuerpo lleno de sangre. A metros del menor había un cuchillo tipo carnicero, que sería el arma homicida. El padre de la víctima fue reducido y esposado en la puerta de otra habitación. 

Personal médico, expertos de la Dirección de Investigaciones (entre ellos, la División Homicidios y Delitos Complejos Criminalistas y Forenses), llegaron a la casa para iniciar las averiguaciones.

El supuesto homicida fue identificado como Germán Adolfo Torres Murad de 34 años, quien vivía con su madre Margarita Murad (75); su hermano Fernando Ariel Torres Murad, y su hijo, Germán Samir Torres, de 3 años.

Asistencia

Mientras el asesino era trasladado al hospital Regional, ya que se había autolesionado, el forense examinó el cuerpo del menor y constató que tenía al menos 12 cuchillazos.

Luego de trabajos de los peritos de Criminalística, y el secuestro de las evidencias, el cadáver del niño fue trasladado a la morgue para ser sometido a una autopsia.

Según indicaron los investigadores, de la casa de la familia Torres Murad secuestraron dos cuchillos, uno carnicero y otro tipo sierrita, y también hallaron un martillo lleno de sangre, que podría haber sido manipulado por el agresor.

Además, encontraron en una de las paredes una leyenda que decía “perdonen, los amo”. El acusado, quien está imputado por el delito de homicidio doblemente calificado por el vínculo y alevosía, aparentemente realizó el escrito, que estaba dirigido a sus familiares, con la sangre de su hijo.

Una de las sospechas de los investigadores sostiene que el menor podría haber sido atacado de un certero cuchillazo mientras dormía, ya que nadie lo escuchó gritar, mientras que la otra hipótesis indicaría que Torres Murad le habría tapado la boca para que nadie pudiera auxiliarlo.

“Tomá matame”, le pidió el homicida a su hermano 

Si bien hasta ahora todo es materia de investigación y los expertos trabajan bajo total hermetismo por orden del fiscal interviniente, los detectives habrían recreado las últimas horas de la familia y del niño. Según las primeras averiguaciones, la familia había tenido una noche “extraña”, ya que habían hecho fumigar la casa por una invasión de hormigas y recién pudieron dormir casi al amanecer. Cerca de las 10.30 la familia había desayunado y cerca de las 11.30 nuevamente se acostaron a dormir, todos menos el atacante.

Al contrario de cómo sucedía todos los días, el pequeño en lugar de ir a dormir con su abuela, se acostó en la cama cucheta donde dormía su padre.

En tanto que Germán quedó en la planta baja, más precisamente en el sector de la cocina, ya que debía preparar el almuerzo para todos. No se sabe aún qué pasó enseguida, cómo se dieron los últimos minutos de vida del pequeño. Cerca de las 13, el acusado con su cuerpo completamente ensangrentado a los gritos despertó a su hermano avisándole lo que había hecho, y mientras amagaba con entregarle un cuchillo sierrita, le decía “matame, dale matame”. Allí Fernando corrió hasta donde estaba el niño y al ver que ya no tenía signos vitales llamó a la policía, ubicada a dos cuadras de su casa.

Pericias toxicológicas y psiquiátricas 

Pasadas las 20.30, el último parte médico indicaba que Torres Murad se encontraba internado en la sala de terapia intensiva con pronóstico reservado, tras haber sido intervenido quirúrgicamente ya que una de las heridas le habría perforado el pulmón. Según se supo, presentaba lesiones en el cuello, brazos, pecho y a la altura de la muñeca.

La Fiscalía a cargo de la causa solicitó que la policía custodie al sujeto a quien además se le practicaron análisis toxicológicos. Otra de las medidas que el representante del MPF solicitó sería pericias psiquiátricas, las que serán realizadas según su recuperación.

¿Brote psicótico o venganza? 

Según se supo, desde hace un año y medio el menor había sido entregado por su madre (que residía a dos casas del lugar) a su padre para que él se hiciera cargo. Desde entonces con ayuda de la abuela del niño, el homicida criaba al pequeño. Los efectivos recibieron testimonios a los otros moradores de la casa quienes indicaron que Germán era violento con el niño, a quien consideraba “muy inquieto” y por ello el niño recibía brutales golpizas.

Además, según la información recolectada por los expertos, el imputado es adicto a las sustancias tóxicas y sin bien en la casa no hallaron ningún tipo de droga, sospechan que podría haber tenido un brote psicótico, producto de la desmedida ingesta.

El homicida habría mantenido una pelea con su ex pareja la noche del lunes. Al parecer la mujer le había manifestado que quería mudarse ya que está en una nueva pareja con quien tiene un bebé.

Según fuentes que trabajaron en el lugar, la intención de la mujer era llevarse al niño a vivir con ella. Al cierre de la presente edición, los investigadores tratan de establecer qué sucedió entre las 11.30 y 13 donde Germán mató a su hijo, sin que haya testigos del macabro hecho.

Fuente: El Liberal