El asesinato de una mujer de 69 años conmocionó este sábado a la ciudad de San Justo, en el norte provincial. Por el crimen detuvieron a uno de sus hijos de 31 años que convivía con ella. Sin embargo, el hombre fue trasladado al Hospital Mira y López por presentar “delirios místicos”.
Este lunes debía hacerse la audiencia imputativa donde se lo señalaría por el “homicidio agravado por el vínculo”. Pero el fiscal de la causa, Guillermo Persello, indicó por Al Derecho y Al Revés que familiares del joven señalaron “algunas actitudes que venía teniendo” por lo que pidieron la intervención de una psicóloga de la AIC para que evaluara al detenido.
La profesional señaló que el hombre tenía delirios del tipo “místicos” y que “era peligroso para sí mismo y para terceros”. Por lo que el hombre fue trasladado a la institución psiquiátrica donde se encuentra internado y medicado por orden judicial.
No obstante, Persello señaló que esperan el informe de la junta de Salud Mental para evaluar si la persona puede participar del proceso legal.
El fiscal aclaró que esto no tiene que ver con la inimputabilidad o no del hombre.
Estos primeros informes “lo que nosotros tenemos que ver es si la persona puede en su momento hacer frente a un acto del proceso”, es decir, si puede entender y participar del proceso legal. Aunque luego pueda ser declarado inimputable en instancias posteriores.
El hecho
Una mujer de 69 años fue asesinada a golpes en su casa de la ciudad santafesina de San Justo y por el crimen detuvieron a uno de sus hijos, quien convivía con ella.
La víctima fue identificada como Dominga Rosa Romero de Sandoval (69), y fue hallada muerta ayer alrededor de las 11.15, en su vivienda situada en Cortada 57 al 1900, en el barrio Reyes de dicha localidad, unos 100 kilómetros al norte de la capital de Santa Fe.
Según explicó en declaraciones radiales el comisario Eduardo Arias, el jefe de la Unidad Regional XVI, personal de la comisaría 2da. de San Justo se trasladó hasta esa casa tras recibir una alerta al 911 que indicó que allí había una persona muerta.
De acuerdo al jefe policial, una hija de la víctima que vive en una casa lindante fue quien descubrió el cadáver de su madre en su habitación.
Al arribar al lugar, el médico policial constató que presentaba un golpe en la frente y una herida en uno de los costados de la cabeza, y que tenía la mandíbula fracturada.
Una de las hijas de la mujer le indicó a la Policía que su madre vivía allí junto a su esposo, quien se encuentra internado por un problema de salud en la ciudad de Santa Fe, y su hijo de 32 años, a quien señaló como posible autor del crimen.
Luego de un operativo, pudieron detener al hombre que se había trasladado hasta un campo, donde les manifestó a los oficiales que “estaba trabajando”, pero no hizo alusión al crimen.