El jefe de Policía de la Provincia se manifestó a favor de la aprobación de la Ley de Emergencia en Seguridad que impulsa el gobernador Omar Perotti. "Muchas cosas no cambiaron porque seguimos teniendo la misma cantidad de [efectivos] y el mismo presupuesto", declaró, en diálogo con Primera Tarde.
En ese sentido, reclamó que en comparación con el año 2016, los recursos para esa área están desfasados en un 53%. Asimismo, remarcó que en Rosario hay 240 patrulleros fuera de servicio, y en Santa Fe 90. Además, en total hay 1.000 uniformados menos que en 2017, según remarcó.
"Si no tenemos una ley que nos habilite, muy poco vamos a poder cambiar", insistió.
No obstante, afirmó que "la operatividad de la policía aumentó un 40% en los últimos 60 días" (es decir, desde el inicio de la gestión Perotti); y una vez más añadió: "la policía está cambiando: su operatividad, sus ganas, su proactividad, pero no cambió el salario y tampoco el presupuesto".
Los vecinos y la violencia
Consultado sobre la violencia que azota a las principales ciudades, la consideró "una continuidad de lo que venía ocurriendo" y ejemplificó con el caso de Los Monos. "Ellos ya eran una banda violenta desde 1995", advirtió. "Están haciendo venganzas entre [bandas]. Están peleando por el territorio. Son empresas ilícitas que resuelven sus problemas de negocios por la vía de la violencia".
"Hubo tal vez inocencia, desapego, desinterés o incompetencia... o complicidad, que llevó a que lleguemos a este punto desde el año '95 hasta hoy", sentenció, en referencia a las conducciones anteriores.
Pero además, opinó: "no ha habido demasiadas condenas judiciales pero tampoco hay condena social. El vecino tiene que cambiar su actitud hacia las actividades ilícitas", tales como el robo y la compra de drogas.
"La población es la que tiene que decir 'no' a esas cosas", pidió.