El sacerdote Néstor Fabián Monzón fue condenado a 16 años de prisión por ser el autor de delitos contra la integridad sexual cometidos en Reconquista en perjuicio de un niño y de una niña, en un juicio oral que se llevó adelante en los tribunales de esa ciudad.
Fue encontrado culpable, el 18 de diciembre de 2019, de abuso gravemente ultrajante y agravado de una nena de cuatro años y un nene de tres.
De manera paralela, el cura era sometido a una investigación canónica que definió este martes la dimisión del estado clerical dispuesta por el Vaticano, es la pena máxima que puede recibir un sacerdote en el ámbito eclesial. En la práctica equivale a la expulsión, se le prohíbe de modo permanente el ejercicio de los derechos propios del estado clerical como celebrar Misa, oír confesiones y administrar los demás sacramentos.
El caso
La investigación comenzó en el año 2015 tras la denuncia de los padres de una de las víctimas. La madre de a niña supuestamente abusada es quien se hizo presente en el Centro de Orientación a la Víctima de Violencia Familiar y Sexual de la Unidad Regional IX de la policía provincial y dejó constancia de lo ocurrido.
Los padres de una niña de sólo tres años denunciaron un 3 de diciembre de 2015 ante la Fiscalía de Reconquista al sacerdote Néstor Monzón. Lo hicieron por un supuesto abuso sexual cometido sobre su hija. Según relató la madre de la menor la niña jugaba una tarde en su casa cuando quedó quieta en un rincón y le contó lo sucedido.
Luego la causa tomó su curso y el cura fue imputado por supuesto abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por su condición de pertenecer al culto religioso.
Esta calificación no sólo determina el abuso sexual en sí sino que también lleva dentro ciertos agregados que se relacionan a ciertas circunstancias que aumentan la responsabilidad penal del sacerdote. Por dar algunos ejemplos y teniendo en cuenta este caso la Ley determina que se agrava el hecho si el abusador es ministro de culto religioso.
Es decir, que la ley prevé circunstancias agravantes del delito, como el vínculo con el agresor: cuando quien comete el abuso es el padre, madre, padrastro, madrastra, abuelo, hermano, tutor, ministro de culto religioso.
La cosa no terminó ahí. En julio de 2016 nuevamente Monzón es denunciado y en este caso es por un abuso sexual a un menor de 4 años que es primo de anterior víctima. La imputación es idéntica: Abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por su condición de pertenecer a un culto religioso"
De esta manera, fue otra vez el sacerdote de la iglesia católica es denunciado por pederasta.