Esperanza sigue conmocionada por la muerte de Gabriela Degiorgio, la mujer de 37 años que fue asesinada dentro de su negocio. La policía brindó una conferencia de prensa donde se dieron los primeros datos precisos y oficiales sobre lo ocurrido en el local ubicado en Rivadavia al 1900 en la localidad santafesina.
Desde la unidad Regional Nº 11 de la Policía de Santa Fe el comisario general Juan Vouylloz, explicó que por el momento “se trata de un homicidio en ocasión de robo pero queda sujeto a la decisión que tome el fiscal con respecto al caso”.
En el relato ante la prensa, el funcionario policial explicó que “fue fundamental el buen funcionamiento de las cámaras de seguridad del local y de otros comercios para poder dar con el agresor y seguir los pasos del mismo para lograr apresarlo”.
Una filmación clave
En lo que respecta a la filmación del comercio, se pudo saber que la ubicación no era la mejor ya que enfocaba a la persona que atendía y a la zona de caja y por esta razón se vio al agresor sólo de espaldas. Igual, los audios de las filmaciones fueron fundamentales para seguir con el avance. Por otro lado, otras cámaras captaron al agresor antes y después del hecho.
Un punto clave es que por el accionar y la agresividad del implicado desde la Policía descartaron de manera automática que se trate de un delincuentede la zona ya que no presentan ese tipo de características.
Uno de los testimonios más contundentes fue la filmación de una despensa donde el delincuente ingresó a comprar una botella de agua. Es la comerciante la que logra identificar al agresor por medio de las filmaciones. Tras el registro de ese comercio se puedo saber que el presunto asesino se va caminando hacia la zona de la terminal de ómnibus luego de dar muerte a la mujer.
Igual, si bien se traslada hacia el lugar de partida de los colectivos, tras hacer los chequeos correspondientes, se logra determinar que el asesino no viajó en micro y se trasladó en remis a la ciudad de Recreo. Siguiendo con la investigación se pudo dar con el conductor que trasladó al asesino hasta el lugar quien fue un testigo fundamental y aportó los datos cerca del mediodía. Al parecer se encontraba en una vivienda de la zona que podría haber sido de una pareja ex pareja del agresor.
Automáticamente la investigación se traslada a esa zona. Ya sin alternativas y a momentos de que la Policía dé con el domicilio donde se encontraba el asesino, éste se hace presente en la comisaría donde decide entregarse y comentar lo sucedido. En ese momento queda detenido y esposado.
Quien encuentra el cuerpo
Gabriela Digiorgio no volvió a su casa en el horario que lo hacía habitualmente. Tras el paso del tiempo fue su marido quien decide que su hijo vaya hasta el local para ver qué era lo ocurrido sin imaginarse el fatal desenlace. Al llegar al lugar, el hijo de la víctima es quien descubre la escena del crimen llama a su padre y se realiza la denuncia al 911.
Con respecto a la muerte de la mujer tras la autopsia se desprende la información que Digiorgio falleció tras un fuerte golpe en su cabeza y se trata de determinar con qué elemento sufrió la agresión en el cráneo.