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El Tribunal Oral en lo Federal Tres (TOF3) fue sorteado para intervenir en el juicio oral y público que se llevará adelante contra el ex titular de la SIDE menemista, Hugo Anzorreguy y el ex juez Juan José Galeano, entre otros, por las irregularidades cometidas en la investigación por el atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), perpetrado el 18 de julio de 1994.

La Cámara de Casación realizó el "sorteo informático de rigor" que determinó que quienes lleven adelante el debate por las irregularidades cometidas en esa causa sean precisamente los mismos jueces que tramitaron el juicio por el atentado que culminó con las nulidades que provocaron la absolución de los imputados.

En este nuevo proceso junto a Anzorreguy y Galeano ocuparán los restantes sitiales de acusados el ex dirigente de la comunidad judía Rubén Beraja, los ex fiscales Eamon Müllen y José Carlos Barbaccia, el abogado Víctor Stinfale; Carlos Alberto Telleldín y su ex compañera Ana Boragni y Patricio Finnen.

A mediados de mayo el juez federal Ariel Lijo elevó a juicio oral a los imputados por las irregularidades que derivaron en la anulación de gran parte de la pesquisa por el atentado a la AMIA, principalmente por el pago ilegal de 400 mil dólares a Telleldin para que acusase a un grupo de policías bonaerense.

Todos están procesados por “peculado” pero los cargos más graves recaen sobre Galeano, quien fue oportunamente destituido por el "jury de enjuiciamiento" a que sometido y ahora deberá hacer frente a esta acusación a la que se le agrega otra imputación por presunta privación ilegítima de la libertad y prevaricato.

Lijo afirmó al elevar la causa a juicio que "se encuentra acreditado que la investigación del atentado se caracterizó por la realización de entrevistas informales, filmaciones clandestinas, escuchas telefónicas ilegales, resoluciones sin el debido respaldo probatorio, manejo arbitrario de categorías procesales" entre otras anomalías.

En ese sentido también aludió a la "formación de legajos con la finalidad de ocultar pruebas de cargo a las partes, declaraciones testimoniales bajo identidad reservada a procesados, coacciones a testigos e imputados para que declaren en determinado sentido”.

Se juzgará además la decisión de gestionar, promover y conseguir los 400 mil dólares que habría aportado la Side para que Telleldín declarase en la causa "en la forma convenida con el ex magistrado” imputando a los policías bonaerenses, lo que efectivamente realizó "cuando se comenzaron a cumplir sus exigencias".

Lijo tuvo por probada “fehacientemente la forma en que Galeano fue creando y acordando con Telleldín el tenor de la declaración que éste debía prestar y la imputación que finalmente se haría en contra de los policías y delimitando quienes serían los responsables para proseguir la investigación”.

"Pudo acreditarse el conocimiento que poseían Galeano, Anzorreguy, Beraja, Telleldín, Stinfale, Brousson, Finnen, Boragni sobre la finalidad del pago y las circunstancias que rodearon dicha maniobra”, y añadió que "el andamiaje ilegal ... no hubiera alcanzado sus objetivos si no hubiese contado con la participación y el aporte de los por entonces funcionarios del Ministerio Público”, Mullen y Barbaccia.