Tras conocerse la posición del Mercado de Productores y Abastecedores de Frutas, Verduras y Hortalizas de Santa Fe y a raíz de los incidentes sucedidos el martes pasado tras el temporal que azotó a la ciudad, el candidato a intendente Niky Cantard fue enfático al señalar la "inacción" de las fuerzas de seguridad y de la Justicia de la provincia y señaló que "estas cosas no pueden volver a ocurrir" en un Estado democrático que respete las garantías de las personas.
"Fueron 9 horas de encierro de cerca de 3.000 personas que eligieron trabajar aun en un feriado en un momento de emergencia para la ciudad de Santa Fe, y se hizo bien poco para ayudarlos", indicó Cantard y agregó que "si el Estado no responde, las calles se transforman más temprano que tarde en tierra de nadie", en referencia a la demora denunciada por los productores por parte de fuerzas provinciales de seguridad y Justicia.
"Es la provincia a través del control de sus fuerzas de seguridad y Justicia la que debe actuar en hechos de este tipo, y no lo hizo, dejando la ciudad a merced de la violencia y el caos", dijo Cantard.
Luego de que sus trabajadores permanecieran encerrados por 9 horas en el edificio del Mercado, por un piquete organizado por vecinos que reclamaban por la falta de luz tras la tormenta del día anterior, los productores dieron a conocer su posición. Dijeron que aunque hicieron "inmediatos reclamos" al 911 para que se los dejara salir del edificio, no obtuvieron ninguna respuesta que les permita "ejercer el derecho de trabajar, transitar y ejercer las libertades individuales", según expresaron.
"Que se cercene la libertad de tránsito, máxime en una situación de emergencia como la que atravesamos, es algo que no podemos admitir como ciudadanos", dijo Cantard en alusión a la situacion "por momentos caótica" que vivieron los productores producto de la "inacción durante horas" de las fuerzas policiales y de seguridad.
Sucede que, según los mismos productores informaron, hasta tuvieron lugar hechos de violencia que involucraron a quienes estaban dentro y fuera del mercado, tales como piedras, agresiones verbales y pedidos de "peajes" para que los vehículos pudieran salir.
"Es el Estado el que debe debe actuar con firmeza con los piquetes, máxime en una situación de emergencia como la que estábamos viviendo. Durante horas no se hizo nada y podría haber terminado todo en una tragedia", indicó Cantard, "pero sobre todo lo que nos invade es la preocupación por saber que ni los vecinos que protestan ni los trabajadores recibieron una respuesta a sus reclamos, y eso es el equivalente a vivir en tierra de nadie".
"Tal como ellos dijeron, el Mercado no podía ni puede solucionar el problema de los vecinos; no es su incumbencia. Están ahí para trabajar, y brindar un servicio a la población. Aun así recibieron todas las consecuencias de esta tremenda inacción", agregó Cantard y finalizó: "Que se cercene la libertad de tránsito, máxime ante una situación de emergencia como la que atravesamos, es algo que no puede volver a ocurrir".