Colón tiene una parada importantísima mañana por Copa Sudamericana. Desde las 19.30 del jueves, estará enfrentando al San Pablo en el estadio Morumbí, en un partido que pasará a formar parte de la historia sabalera en copas internacionales.
Muchos sabaleros partieron hacia Brasil para acompañar el equipo y, ante la abultada convocatoria del encuentro, la Comisión Directiva de Colón tiene intenciones de gestionar ante el Consulado Argentino más entradas para el público sabalero.
Entre todos los sabaleros que van a asistir al partido, hay un grupo especial: se trata de los integrantes de la filial que el club santafesino tiene en San Pablo. Lo curioso es que de los 26 participantes del grupo, sólo uno es argentino, y por supuesto, santafesino. El resto, son todos brasileños simpatizantes de equipos de su país que además "hinchan" por Colón.
Enrique Di Lucca es el colonista nacido en barrio Roma y que, desde 1980, vive en Brasil por cuestiones laborales. En diálogo con LT10, el director de comunicaciones de la filial de Colón en San Pablo, contó cómo surgió la idea de crear esta delegación: en 1991, fue el único argentino entre un grupo de brasileños que se juntaba a jugar a la pelota, y al momento de decidir qué camiseta usar, a Di Lucca se le ocurrió que podía ser la casaca sabalera, para evitar usar alguna de un equipo carioca que no represente a todos los amigos.
Y ahí nació el amor por Colón. Primero informalmente, y en 1993 con el aval de Vignatti (durante su primer mandato como presidente de la entidad sabalera) que autorizó la creación de la filial.
Cuando se enteró que el sabalero iba a jugar en San Pablo, Enrique se quedó "atónito": "Inmediatamente empecé a llamar a los muchachos. Cuando salió la comunicación de la Sudamericana, el primer llamado que recibí fue de un sampaolino que me decía ¡'esto es una locura, cómo hago ahora'!", en referencia a que iban a tener "repartir el corazón" hacia ambos equipos.