Una buena prueba tendrá el Real Madrid para demostrar que los tropezones que sufrió en la última semana, son parte del pasado. Recibirá en el Santiago Bernabéu al Málaga, con la misión de ganar para consagrarse como campeón de invierno, mote que le dan en España al equipo que ocupa el primer lugar del campeonato, al término de la última fecha de la primera ronda.
Los Merengues le llevan un punto de distancia al Sevilla, dos al Barcelona y tres al Atlético Madrid (ya completó las primeras 19 jornadas). Por eso, en caso de triunfar ante su público, será un objetivo imposible de alcanzar para los de Jorge Sampaoli y Luis Enrique, que se presentarán mañana (visitarán al Osasuna y Eibar, respectivamente).
El cuadro dirigido por Zinedine Zidane, que debe su duelo ante el Valencia por la fecha 16 (postergado por su participación en el Mundial de Clubes), perdió justamente el fin de semana pasado en casa de los sevillanos y más tarde besó la lona en casa ante el Celta de Eduardo Berizzo, en un encuentro válido por la ida de los cuartos de final de la Copa del Rey.
Cristiano Ronaldo y el séquito de figuras tratarán de poner fin a las críticas que surgieron por esta inesperada racha negativa, frente a un elenco malagueño que no triunfa hace cinco fechas. Los del uruguayo Marcelo Romero no quieren irse con las manos vacías de Madrid para mantenerse alejados de la zona de descenso y acercarse a la clasificación a las copas.