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La segunda jornada del juicio oral y público contra el ex jefe de policía de provincia, Hugo Tognoli, dos policías que cumplieron funciones en la ex drogas peligrosas y dos personas acusadas de fabricación y consumo de estupefacientes, se centró en los detalles del operativo donde en 2012 se logró desbaratar una cocina de cocaína en Colastiné, ubicada en el domicilio de uno de los acusados, Daniel “el tuerto” Mendoza.

Durante la audiencia realizada ayer en el Tribunal Oral Federal, se escucharon los testimonios de policías y testigos de actuación que participaron del procedimiento que terminó con la detención de Mendoza y Fernando Torres. Desde la acusación, se intentó profundizar la presunta vinculación que podrían tener todos los detenidos entre sí, tratando de conseguir elementos de prueba del supuesto encubrimiento policial de Hugo Tognoli y José Luis Baella, entonces Subjefe de Inteligencia de la ex Drogas Peligrosas.

La sirena azul
Los policías que prestaron declaración testimonial, hicieron un repaso verbal de los operativos antidroga realizados en julio de 2012 en la Terminal de Ómnibus (donde se logra detener a Torres) y en la finca de Colastiné, donde tras ser filmada una entrega de droga, se logró la orden de allanamiento para ingresar a la casa de Mendoza, donde funcionaba una cocina de cocaína.

Los testigos también participaron de un reconocimiento de los elementos secuestrados (que se exhibieron en el recinto) entre los que se encontraban una licuadora, una aspiradora, balanzas, prensas, botellas con precursores hídricos y uno que llamó especialmente la atención, que fue una baliza azul con sirena de base imantada asociada al uso policial.

Fue el testimonio del policía Alejandro Tognollo, quien desempeñó funciones en la Dirección de Prevención de Adicciones entre 2010/2012 como subjefe de Inteligencia y quien coordinó el operativo antidroga en la casa de Mendoza, uno de los más esclarecedores. “Esa es una sirena vieja, ya no se usa. La secuestré porque no puede ser utilizada para cualquier cosa, no es para que lo use gente común, y puede servir para despistar”, afirmó Tognollo ante la pregunta si era un elemento que se podía conseguir libremente.

Connivencia polical, ¿sí o no?
En el juicio, Alejandro Tognollo también se refirió al supuesto encubrimiento de la cúpula policial del accionar de Mendoza en la zona. Dijo que “nunca recibieron una orden de dejar de investigar a nadie” y que en cuanto al accionar operativo “estaban siempre en contacto con el juzgado”.

El lunes, Jose Luis Baella, ex jefe de inteligencia de Drogas había declarado que “nunca hubo ánimo de no investigar sino que se priorizaraban las causas donde pudieran tener resultados para mostrar”.

Por la tarde, prestó declaración el Carlos Pagano, que fue Jefe de Inteligencia de la ex Drogas Peligrosas, quien dijo “conocer al Tuerto Mendoza a través de investigaciones que comenzaron a realizarse desde 2009 en la dependencia”, estableciendo un contrapunto con lo expresado por Hugo Tognoli quien en 2011 remitió un informe a la Dirección de Asuntos Internos indicando que Mendoza no figuraba en el registro de infractores a la ley de drogas.

Vale recordar, que los policías enjuiciados están sospechados también haber favorecido al Tuerto Mendoza a eludir las investigaciones del Ministerio Público Fiscal, demorando su detención, que recién logró concretarse en 2012.