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Los empresarios de la medicina prepaga observan con preocupación el estado de sus cuentas. Es que los días del calendario continúan cayendo y las tarifas de los servicios permanecen inconmovibles, mientras avanza la inflación. El último incremento de las cuotas, del orden del 5,5 por ciento, se aplicó a principios de año, cuando la devaluación acelerada del peso erosionaba sensiblemente todo tipo de valores preexistentes.

Las prepagas y los centros de salud privados pretenden que sus tarifas aumenten en simultáneo a las subas salariales por paritarias, que, aseguran, no bajarán del 30 por ciento. Ya se rubricaron varios acuerdos que afectan tangencialmente al negocio de la salud, como el de los trabajadores de las droguerías y laboratorios, que alcanzaron un incremento acumulado anual del 32 por ciento.

En los últimos días, directivos del sector patronal presentaron como propuesta a la Superintendencia de Servicio de Salud un aumento de las cuotas del 28,5%, que estaría repartido en tres tramos de 9,5 por ciento a lo largo de 2014.

Hasta ahora no hay respuesta de la autoridad negociadora. El factor tiempo beneficia a los clientes -ya que seguirán gozando de los costos actuales-, pero afecta a las finanzas de los prestadores del servicio. La intención de las compañías era que el primer incremento fuera entre mayo y junio. Finalmente, esto no será posible, ya que todo aumento debe ser informado con 30 días de antelación, de acuerdo a las actuales normas regulatorias.

Según informa el diario El Cronista Comercial, la Superintendencia de Servicios de Salud tiene en estudio un esquema de tres subas permitidas al año. Cada aumento sería cada tres meses, en el cual se analizará puntualmente los incrementos.

Así, el panorama no es el más optimista para las patronales. Si bien la inflación de 2014 supera la de los años precedentes, el reclamo de la medicina está lejos de los últimos aumentos permitidos por el Gobierno, que no estuvieron por encima del 20 por ciento.

Lockout de la medicina privada

Las clínicas, sanatorios y centros de diagnóstico nucleados en Adecra y Cedim pararán el próximo miércoles. Sólo atenderán urgencias. De no tener respuestas por parte de las autoridades se anuncia una nueva medida, pero por 48 horas para los días 28 y 29 del mismo mes.

Los centros sanitarios advierten que es grave su situación financiera, atada a los movimientos de tarifas que puede hacer el sector de la medicina prepaga, en definitiva sus clientes.

Según denuncian las entidades, los incrementos en los costos superan todas las barreras: en medicamentos más del 90%; alimentación, lavandería y seguridad 100%; pólizas de seguro 65%; y se aproxima una discusión salarial que estaría en el orden del 30 por ciento.