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 El actual número 4 del ránking mundial de la ATP a través de un comunicado detalló todo lo ocurrido en su visita a la Clínica Mayo en Rochester pero no se detalló si el jugador regresará a la Argentina, permanecerá en los Estados Unidos o partirá rumbo a Europa, ni cuándo estima regresar a los courts, aprovechando el "parate" del circuito profesional por la disputa de la Copa Davis el próximo fin de semana.

Cabe recordar que la molestia en el sector apareció durante el Abierto de Australia, donde quedó eliminado en segunda rueda tras un maratónico encuentro a cinco sets frente al español Roberto Bautista Agut.

Del Potro emprendió viaje el lunes pasado por la noche desde el Aeropuerto de Ezeiza hasta Rochester, Minnesota, donde realizó la consulta con el doctor Berger, en la Clínica Mayo.

El tandilense había sido infiltrado por última vez en la gira del US Open de 2013, cuando volvió a sufrir los dolores que también había padecido en 2012 en la gira que incluyó Cincinnati, el Abierto de los Estados Unidos y la Copa Davis con República Checa.

Asimismo, también tuvo algunos problemas relacionados a principios de 2013 en el raid por Marsella, Dubai, Indian Wells y Miami.

La infiltración en aquella gira, el trabajo médico y kinesiológico le permitieron jugar sin molestias hasta la obtención del ATP de Sydney. Sin embargo, sufrió fuertes dolores en sus días bajo el calor de Melbourne y, al regresar a la Argentina, cuidó la mano para desinflamar la zona.

Teniendo pendientes estudios que quería realizar el doctor Berger, Del Potro viajó rumbo a los Estados Unidos para concretar los mismos.

En 2010, el tandilense se operó la otra muñeca, la derecha, en el tendón cubital del extensor carpiano, una lesión que el argentino arrastraba desde hace tiempo y que lo mantuvo al margen de las canchas desde enero.