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 "Lifschitz es un hijo de puta; que le pregunte primero a (Raúl) Lamberto qué pasó en la alcaidía", fue la respuesta de Pedro González al pedido del senador provincial Miguel Lifschitz para que el intendente de Villa Gobernador Gálvez vaya a la Cámara alta para aportar información sobre las versiones periodísticas sobre su vinculación con el supuesto narco Miguel Japo Saboldi, uno de los tres muertos en abril pasado en la Jefatura por el incendio del lugar donde estaba recluido.

Para despegarse de las acusaciones sobre su relación con el narcotráfico en la localidad que administra, dijo: "A usted le parece que yo puedo estar metido en esto, con 65 años, con tres nietas, una familia armada, con mis hijas... dejen de hablar al pedo. Los diarios y la gente. Me han masacrado toda la vida: primero que tenía una casa al lado de Susana Giménez. ¿Si yo me hubiera podido garchar a Susana Giménez lo van a saber ustedes?", cerró su explicación con lo mejor de su estilo.

Tapar el sol. "No me extrañan que este tipo de injurias o barbaridades las diga el intendente de Villa Gobernador Gálvez", contraatacó el ex alcalde rosarino, y en otro registro, mandó su estocada: "Creo que se está intentando tapar el sol con las manos. No nos interesan los insultos sino llegar al fondo de la cuestión". Luego siguió: "Evidentemente hay situaciones complejas que están en manos de la Justicia y que esperamos nosotros que en poco tiempo pueda haber indicios o resultados más concretos pero que están hablando de una red de complicidades existente en la ciudad de Villa Gobernador Gálvez" que "evidentemente tiene que ver con muchos de los hechos que han venido aconteciendo", en referencia a los recientes ajusticiamientos a tiros en el sur de Rosario y Gálvez.

Lifschitz explicó que el pedido para que González concurra al Parlamento a dar explicaciones surgió de "la señora (Norma) Acosta (viuda de Saboldi), que aparentemente estuvo vinculada o conocía al intendente de Villa Gobernador Gálvez y le hizo imputaciones muy serias".

Credibilidad. Aunque aclaró que la mujer no le merece "ninguna credibilidad ni confianza" porque no la conoce, insistió en que "las imputaciones eran muy fuertes y personales". Con esa convicción Lifschitz planteó en la Legislatura "un pedido para que lo invitara (a González) a una sesión para dar explicaciones, incluso a hacer su descargo en todo caso si tenía argumentos para poder explicar".

"Lifschitz es un hijo de puta y que le pregunte primero a (el ministro de Seguridad Raúl) Lamberto qué pasó en la alcaidía", declinó González la invitación e insistió en que no conocía ni a Saboldi ni a su mujer Norma Acosta. "A esa mujer no la conozco, salió hablando boludeces, y a Saboldi tampoco lo conocía. Cuando salí hablando que lo conocía, pensé que estaban hablando de Fabio López, el chico asesinado (días antes de los sucesos de la jefatura de 5 balazos mientras dormía en su casa). No sé quién es Saboldi, solo sé que lo mataron en la alcaidía de Rosario. Nada más".

"El mayor destructor del narcotráfico soy yo —dijo luego—, y la mayoría de las veces les paso a la policía (el dato de) dónde venden droga en la ciudad". Apuntó también que "la policía viene haciendo un excelente trabajo" y que pese al recurrente pedido ante el ministro de Seguridad para trabajar sobre este tema, Lamberto "se hace el pelotudo". González invirtió así la acusación al responsabilizar al gobierno socialista por su política de Seguridad.

Sobre las recientes muertes en su territorio, las consideró "ajustes de cuenta entre ellos" (por las bandas de narcos que operan en la zona) . También rechazó otra de las acusaciones de Norma Acosta sobre sus presuntos vínculos con el ex barra de Newell\\\\\\'s Luis Pollo Bassi (sindicado por la mujer como responsable de la muerte de Saboldi). "No tengo relación con él: al Pollo Bassi lo vi dos veces. No trabaja para mí y lo vi dos veces en mi vida".