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El reservorio de Vaca Muerta sigue generando noticias en el mundo energético. Ahora es el turno de una nueva operación de compra/venta de parte de la estatizada YPF.

La empresa comandada por Miguel Galuccio cerró un acuerdo con la compañía Petrolera Argentina por la que le comprará a esta última una participación que tiene en el yacimiento de Vaca Muerta en Neuquén.

“El pasado 8 de marzo se firmó un acuerdo de entendimiento entre YPF y Petrolera Argentina que incluye la venta de un área en Vaca Muerta y un entendimiento comercial que consta de tres puntos”, explicó a El Cronista un hombre que sigue de cerca las negociaciones.

“Está todo listo para poder cerrar esta semana, seguramente más cercano al viernes”, agregó la misma fuente.

Petrolera Argentina es una compañía 100% de capital nacional que nació en 2001. Presidida por Miguel Schvartzbaum, la compañía tiene su principal planta en el Parque Industrial Petroquímico de Plaza Huincul, Neuquén, donde dispone de una capacidad de producción de 900 m3, y en breve alcanzará los 1.400 m3/día.

Además, en 2007 adquirió Maikop y Refinadora Neuquina S.A. y funda Renasa, compañía que buscaba convertirse en una de las principales productores de nafta del país. La venta de Petrolera Argentina a la estatal se debió a los problemas económicos que le trajo la caída del Plan Refino Plus (programa de incentivo a la producción impulsado por el Estado Nacional).

Según publicó surtidores.com, Petrolera Argentina y su refinería estaban incluidas en ese Plan que se suspendió en febrero de 2012. De acuerdo a la información provista por la Secretaría de Energía, la empresa tenía asignado un monto de inversión de u$s 98 millones, que truncó la decisión del Ministerio de Planificación. La planta nunca se pudo terminar y la empresa comenzó a transitar un período de crisis que impulsó esta operación.

“La petrolera de Schvartzbaum tiene que cobrar un saldo de Refino Plus que está atrasado, por eso salieron a vender el activo a futuro más importante que tienen por su enorme potencial productivo en shale oil”.
Desde YPF no confirmaron ni desmintieron la noticia.

Los que lo conocen dicen que el CEO de Petrolera Argentina no cambió su estrategia y planea seguir adelante. “Tuvo problemas de febrero a junio de 2012 y después volvió a operar”. Y, aunque persiste con su idea de conformar una red de estaciones en las localidades marginales, sigue con un horizonte un poco complicado.

Si la decisión de vender a YPF es consecuencia de las medidas tomadas en 2012, de no concretar un cambio para el sector la compañía creada en 2001 seguirá acumulando problemas.
A esto habría que agregarle que el artículo 56 de la Ley 26.784 (ley de presupuesto de la Nación), que permite a las petroleras la importación de naftas grado II y III con la exención de los impuestos a los combustibles y fondo hídrico de infraestructura, impactó con fuerza en su esquema de negocios.

Es decir, por ley es más competitiva la importación que la compra local de nafta.
“Hasta ahora llevan comprados 200 m3 que representan u$s 210 millones que se fueron y que se podrían haber quedado si se lo compraban, por ejemplo, a Renasa y haber saneado a la empresa”, dicen en el sector.