En la antesala de las elecciones en Colón del próximo domingo en el Roque Otrino, Adrián Marini, habló con Diez en Deportes y contó cómo transita este cierre de año mientras aguarda por un nuevo rol en 2026. Con la serenidad de quien conoce cada rincón del club, explicó por qué cree que no se logró hacer pie en las últimas temporadas luego del descenso y qué lo motiva a seguir siendo parte.
Un recorrido que marcó identidad
“El camino me marcó un rumbo dentro del club y por eso quizás la gente lo reconoce. Yo siempre estoy para Colón”, aseguró.
Recordó también su paso por el equipo principal en momentos complejos: “La experiencia que tuve en ese plantel fue grande. Wanchope (Ábila), el Pulga (Rodríguez) y (Christian) Bernardi… jugadores con trayectoria y personalidad. Uno dio todo y ellos se brindaron por completo. Pero esto es fútbol y a veces los resultados no acompañan”.
Para Marini, ese proceso fue clave mirando hacia adelante: “Fue un aprendizaje para mí pensando en el futuro al frente de un club. Con todos mantengo una relación excelente, lo que muestra que muchas veces va más allá de lo deportivo”.
Del banco a la captación
Tras dirigir la reserva en 2023, a comienzos de 2024 el club lo convocó para trabajar en la captación de talentos. “Hicimos grandes pruebas y este año repetimos el trabajo, ya con la incorporación de Chueco Robledo y Javier López. Fue un año intenso, probando e incorporando jugadores”, repasó.
En plena recta final electoral, Chupete charló con todas las listas que buscan conducir el club. “No tengo vínculo con ninguno, pero hablé con todos los candidatos. Yo trabajo para el club y para el club: quien gane me encontrará ahí. Tengo más de 40 años en Colón y uno está preparado para cuando lo llamen”, afirmó.
El deseo intacto de dirigir
Aunque respeta los procesos, Marini no esconde su vocación. “Esto va con todo respeto para el técnico de turno, pero uno siempre tiene ganas de dirigir. Por cuestiones organizativas, la dirigencia te acomoda en otros aspectos. Veremos el año que viene cómo será. Estoy siempre predispuesto. Si no es acá, quizás después en otro club”, admitió.
El exentrenador destacó el vínculo con el hincha: “Es recíproco el cariño. Donde voy, no paran los pedidos de fotos y mensajes. Es lo lindo: la gente reconoce la humildad y el sacrificio. Es un cariño inmenso”.
Marini también analizó por qué Colón no logró recuperarse rápidamente tras bajar de categoría. “Siempre dije que la primera medida fue dejar a la mayoría de los jugadores cuando descendimos, algo que yo no hubiera hecho. Era un equipo armado y así es más fácil volver a empezar, sobre todo con las ansias de revancha. Después, cambiar técnicos ante la necesidad de buscar otra cosa… son decisiones que quizás no ayudaron. Pero bueno, es la óptica de un hincha”, opinó.
Pese al panorama, Chupete se muestra confiado: “Quiero seguir creciendo en el club. Tengo experiencia y sé el camino que se puede hacer para pelear la Primera Nacional, porque la jugué. Lo importante es tener sabiduría. Ojalá se dé de la mejor manera en la próxima temporada”.