Colón cerró una temporada cargada de altibajos y, desde este viernes, el plantel profesional inicia su período de vacaciones, aunque el descanso llega en medio de un clima enrarecido. Con la continuidad de Ezequiel Medrán atada a las elecciones de fin de año y un retraso salarial significativo, el Sabalero atraviesa días de preocupación más que de tranquilidad.
Luego de finalizar su participación en el Torneo de la Primera Nacional, el equipo mantuvo una semana de entrenamientos en el predio 4 de Junio, bajo la conducción del cuerpo técnico que, por ahora, sigue en funciones. Pero el panorama está lejos de ser ideal: los futbolistas acumulan varios meses de deuda y la situación económica del club volvió a tensar la relación entre dirigencia y plantel.
Un conflicto que crece puertas adentro
De acuerdo a lo que pudo confirmar Diez en Deportes, recién hace pocos días se abonaron los haberes de julio, mientras que los pagos del convenio con AFA (agosto y septiembre) se encuentran al día. No ocurre lo mismo con los derechos de imagen, que representan la parte más sustancial del salario, correspondientes también a esos dos meses. En los próximos días, además, vencerá el pago de octubre, lo que podría agravar el escenario.
Esta situación generó molestia entre los jugadores, algunos de los cuales esperaban resolver su continuidad antes del receso, pero las deudas existentes impidieron cerrar las rescisiones que la dirigencia pretendía.
Un descanso con la mirada puesta en noviembre
El entrenador Ezequiel Medrán dispuso que el regreso al trabajo sea el lunes 24 de noviembre, aunque aclaró que no todos deberán presentarse en esa fecha.
Los juveniles que alternaron entre Primera y Reserva, y los futbolistas con contrato vigente hasta 2026, fueron citados una semana antes para realizar tareas diferenciadas, con la intención de mantener el ritmo y sostener la base del proyecto.
Medrán, quien llegó en un contexto complejo y logró estabilizar al equipo en la parte final del campeonato, espera una definición política que le permita saber si continuará al frente del plantel en 2026.
El club, en una encrucijada
Mientras tanto, Colón entra en receso con más preguntas que respuestas. El escenario electoral, previsto para fin de año, será clave para delinear el futuro institucional y deportivo.
La deuda con los jugadores, la necesidad de depurar el plantel y la incertidumbre sobre el cuerpo técnico conforman un panorama que preocupa a los hinchas y deja en claro que, más allá del descanso, el Sabalero aún no encuentra la paz que necesita para empezar a reconstruirse.