El plantel de Colón transita sus últimos días de trabajo formal antes del receso, mientras el cuerpo técnico encabezado por Ezequiel Medrán ya diagrama la hoja de ruta para el tramo final del año. El entrenador sabalero tiene previsto licenciar al plantel profesional el próximo viernes, para luego retomar la actividad el lunes 24 de noviembre, cuando se pondrá en marcha un nuevo ciclo de entrenamientos enfocado en el desarrollo de futbolistas juveniles.
Según lo planificado, el 17 de noviembre comenzará una minipretemporada de dos semanas destinada exclusivamente a 22 jugadores pertenecientes a las divisiones inferiores, varios de los cuales ya tuvieron contacto con la Primera durante el año. A ellos se sumarán entre 10 y 12 jóvenes que serán evaluados por el cuerpo técnico, con el objetivo de comenzar a integrarlos al proyecto profesional.
La iniciativa se enmarca dentro del plan de proyección juvenil que impulsa Medrán, quien pretende ampliar la base del plantel con valores surgidos del club y potenciar el sentido de pertenencia dentro del grupo. “La idea es mirar hacia adentro, conocer a los chicos y que ellos también entiendan cómo trabajamos”, habría manifestado en su entorno el entrenador, que considera clave esa etapa para delinear el próximo año.
Más allá de que su continuidad dependerá del resultado de las elecciones del 30 de noviembre, Medrán decidió no frenar la planificación y mantener la estructura de trabajo hasta el último día. De esta manera, busca dejar sentadas las bases de un modelo que apunta a darle protagonismo a los jóvenes y consolidar una identidad futbolística basada en el crecimiento interno.
Mientras el plantel profesional se prepara para el descanso, el foco estará puesto en esa minipretemporada formativa que servirá como una radiografía del futuro de Colón. Allí, el entrenador podrá observar de cerca a los talentos de la cantera y evaluar quiénes están en condiciones de sumarse a la próxima etapa de reconstrucción deportiva del club.