Luis Medero conoce lo que significa vestir la camiseta de Colón. Campeón, referente y hoy parte activa de la agrupación Sangre de Campeones, no dudó en poner el cuerpo en un momento crítico del club. Este miércoles fue uno de los que participó de la reunión con los referentes del plantel profesional, y luego dejó definiciones fuertes sobre el presente del equipo y lo que se necesita para salir del pozo.
“No es fácil estar en Colón”, disparó sin rodeos. “Este es un club grande, exigente, con una historia pesada. Hay que tener personalidad, jerarquía y bancarse los momentos malos. Eso no es para cualquiera”, agregó tras la consulta de Diez en Deportes.
El encuentro, que se desarrolló en el Hotel de Campo, sirvió para acercar posiciones, compartir miradas y tratar de encender una chispa anímica en un plantel que lleva ocho partidos sin ganar y necesita recuperar el rumbo cuanto antes. En representación del equipo estuvieron los capitanes Pulga Rodríguez, Christian Bernardi y Nicolás Talpone, además del DT Ezequiel Medrán.
Medero, que como jugador vivió etapas gloriosas con el Sabalero, no ocultó su dolor por el presente: “Me pone muy mal. Viví momentos hermosos en este club y llegar a esta situación, con el equipo en la Primera Nacional y con la posibilidad real de descender… es algo que te llena de tristeza”, confesó.
Aun así, su mensaje no fue derrotista. Por el contrario, puso el acento en el valor del compromiso y la responsabilidad. “A los referentes se les pide más, y ellos lo saben. Son los primeros en hacerse cargo. Están dolidos, pero también decididos a revertirlo. No se esconden”, aseguró.
El exdefensor también se refirió a cómo vio al entrenador: “A Medrán lo noté bien. Firme, convencido, confiado en el grupo. Es un técnico preparado y con muchas ganas de salir adelante. Y eso también es clave: el liderazgo desde el banco tiene que estar sólido, y él lo está”.
“Hablamos el mismo idioma con todos. Fue darles mi visión, nada más. Un intercambio para tratar de generar alguna reacción. Los jugadores son conscientes de lo que está pasando y sentir el respaldo de todos creo que también es valioso”, explicó.
Medero cerró su análisis con un pedido claro a la gente: “La cancha tiene que ser un empujón, no un peso. Se necesita al hincha alentando, contagiando. Sabemos que duele, que se sufre, pero este no es momento para bajarse. Todos juntos, desde nuestro lugar, tenemos que empujar para salir”.