En menos de una semana, los vecinos de Tacuari al 7800, que se encuentra entre Pavón y Larrea, en Guadalupe norte se volvieron el blanco de delincuentes que operan, incluso, a plena luz del día.
El primero de los episodios reportados ocurrió en la noche del jueves cuando una vecina, que tenía su auto estacionado en la puerta, sufrió la rotura del vidrio trasero. Sólo fueron daños, ya que no había nada adentro que pudieran llevarse.
El viernes, fue el turno de otro vecino, cuya casa se encuentra a la vuelta, al que le rompieron la ventana y le sustrajeron un televisor y una computadora. Sucedió a las 9.30 de la mañana y el ladrón se fue caminando a plena luz del día.
El sábado, la misma vecina a la que le rompieron el vidrio del auto volvió a convertirse en la tentativa de un robo, cuando intentaron ingresar a su casa. Tumbaron la puerta principal, pero no pudieron acceder debido a que tiene doble puerta.
Y este domingo, también a plena luz del día, mientras dos mujeres descargaban elementos de un vehículo, se les abalanza un sujeto con la intención de robarles. Rápidamente, una de ellas comienza a gritar y alerta a un vecino que sale de su casa y también grita para espantar al delincuente que finalmente se da a la fuga sin lograr su cometido.
“Están a full, nunca pasó algo así y menos en la misma cuadra”, declaró un vecino fatigados de la inseguridad diaria. “La situación no da para más y estamos cansados de los reclamos” reforzó otra.