Qué un día viene y al otro no. Qué se solucionó todo y al otro día se complica. La novela del arribo del arquero Lucas Acosta a Colón dejará muchas hojas para escribir al respecto. El jugador que tanto pidió el entrenador Pablo Lavallén todavía sigue en Belgrano y, pese a que está todo arreglado entre los clubes, todavía esto no tiene un final feliz.
¿Qué pasa? El golero, que está en conflicto con la comisión directiva pirata, debe firmar la renovación de contrato para pasar a préstamo al Sabalero, algo que iba a concretarse el lunes pasado, pero no fue así. Incluso volvió a sumarse a los entrenamientos con la reserva haciendo que la incertidumbre sea mayor.
Está más que claro que hay un juego de especulaciones, ya que el guardametas sabe que en seis meses queda libre y podrá negociar por su parte con el pase en su poder. Por eso estaba reacio a poner el gancho. Obviamente que el Celeste perdería así parte de su patrimonio y quería negociarlo al Sabalero, pero hoy la realidad es que el pase está frenado.
Por si fuera poco el libro de transferencias cierra este jueves y, salvo que haya avances raudos en estas horas, Lucas Acosta se quedaría en Córdoba a cumplir su contrato. En consecuencia, Colón no tendría a otro arquero como solicitó el DT, a excepción que aparezca algo nuevo de repente.