Este fin de semana se produjeron desmoronamientos en la barranca que se encuentra en la Toma en Paraná donde se encuentra alojada una gran torre de alta tensión que lleva energía a gran parte de la ciudad vecina y se investiga si ese traslado de energía puede afectar a Santa Fe.
En la madrugada del sábado se pudo observar que cayó al río Paraná una gran parte de la malla de contención de hormigón que se realizó hace 10 años para proteger a la torre de la erosión del suelo producto de la corriente del agua.
La torre está ubicada en calle Blas Parera al final, justo en el ingreso al predio municipal de la Toma Vieja.
El último desmoronamiento se dio en septiembre de 2015 y causó la caída de dos precarias viviendas erigidas sobre la barranca, además de árboles y una gran masa de tierra. El deslizamiento ocurrió sobre el kilómetro 603,5; en la margen izquierda del río Paraná se debió a “causas naturales”, según habían asegurado especialistas.
Por su parte, desde Enersa emitieron un comunicado este domingo, donde se asegura que “el sistema eléctrico funciona con absoluta normalidad”.
Según se pudo saber desde la empresa de energía de Entre Ríos se dio aviso formal y urgente a TRANSENER S.A., la compañía responsable del transporte de energía eléctrica en alta tensión, para que efectúe las reparaciones pertinentes en el menor tiempo posible y sin que esto implique ningún tipo de inconveniente para los usuarios".