El joven de 35 años con parálisis cerebral, Rodrigo Espino, hijo de la pareja que fue encontrada sin vida el miércoles en una casa de barrio Sur, sigue en estado crítico, según confirmó el director del hospital Cullen, Juan Pablo Poletti, a LT10.
El médico detalló que el paciente continúa en la Unidad de Terapia Intensiva "en estado crítico, estable, con pronóstico reservado". En ese orden, agregó que "la afección más importante que presenta es insuficiencia respiratoria, con neumonía y un cuadro infeccioso respiratorio que es lo que condiciona la gravedad de sue stado de salud".
Pese a este cuadro, Poletti precisó que la presión arterial del joven está controlada pero destacó que se encuentra con asistencia respiratoria mecánica "por vía no invasiva" y seguirá en la Unidad crítica hasta que muestre alguna evolución.
Rodrigo, que padece severa discapacidad motriz y mental, ingresó al Cullen con un cuadro de deshidratación, abandono e hipotermia. El joven, que no puede moverse por sus propios medios estuvo más de 48 horas sin asistencia de ningún tipo, según se estima por la data de muerte de sus padres.
Tras pasar cuatro días solo y sin asistencia médica dentro de su hogar, apenas entró a la guardia, el muchacho fue estabilizado con un tratamiento de reposición de líquidos pero su estado de salud se fue complicando ante el deterioro que le causó a su estado de salud la falta de alimentos y cuidado desde el momento de la muerte de sus padres hasta que lo encontraron.
El caso sigue planteando más dudas que certezas a la espera de los resultados definitivos de la autopsia de la pareja y las pericias que se están realizando sobre la camioneta de la familia que fue hallada este viernes en barrio Santa Rosa de Lima.
La Renault Duster color rojo fue encontrada abandonada en inmediaciones de las calles Azopardo y La Rioja, según dejaron trascender voceros judiciales. Tenía signos de haber sido chocada recientemente y la chapa patente se encontraba doblada.