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Al mismo tiempo que Italia está sometida a una severa cura de austeridad, en internet proliferan las críticas contra los privilegios de la "casta" política, acusada de ser la única que no se aprieta el cinturón.

Desde hace algunas semanas, un cierto "Spider Truman", que asegura haber trabajado durante varios años en la Cámara de Diputados antes de ser despedido, escandaliza en internet revelando las ventajas que disfrutan los parlamentarios.

Su página en Facebook cuenta ya con 341.800 seguidores y este número no cesa de aumentar.

En su blog "Los secretos de la Casta", asegura que algunos parlamentarios denuncian ser víctimas de robos para cobrar de las compañías aseguradoras y hasta se envían cartas de amenaza para que les sean asignados guardaespaldas.

Según este bloguero anónimo, el Parlamento emplea a nueve peluqueros a los que paga un salario mensual de 11.000 euros (casi 16.000 dólares). Una noticia desmentida por la Cámara de Diputados, que asegura que... sólo emplea a siete peluqueros, a los que paga 2.400 euros al mes (3.500 dólares), casi el doble del salario medio en Italia, que no sobrepasa los 1.300 euros mensuales.

Estas revelaciones han revolucionado la red.

"¡Parásitos y aprovechados!, clama Valeria en su blog. "Nos roban nuestro futuro", añade Fausto, mientras que Simon advierte que "a sus ojos, somos 60 millones de marionetas (...) pero que sean prudentes porque 60 millones son mucha gente, están jugando con fuego".

"Los políticos tienen privilegios absurdos y salarios exorbitantes... Es como su hubiésemos regresado a la antigua Grecia, con los dioses en el monte Olimpo que deciden la suerte de la plebe. Es hora de que Italia se despierte y diga ¡Basta ya! a estas injusticias", explicó a la AFP el bloguero Leonardo Monti, de 21 años.

"Lo que necesitamos es un buen ahorcamiento público", no duda en decir mtmchat en un blog. Otros internautas son más fatalistas. "Somos ovejas y nos merecemos esto", dice F. Rodi.

Según la prensa, estos privilegios suponen varios millones de euros cada año: coches con chófer, billetes de avión y tren, entradas de cine o de teatro, descuentos en restaurantes o en gastos sanitarios, ... Y la remuneración media de los parlamentarios es de 11.704 euros al mes, es decir, el doble que la media de los parlamentarios europeos.