El 2016 será recordado por muchos consumidores como el año en que debieron olvidarse de algunos de sus placeres -como ir a la cancha, cenar afuera o asistir al cinea raíz de la pérdida del poder adquisitivo.
Es que los "clásicos" del disfrute argentino se encarecieron algunos incluso por encima del 40%, que es la inflación anual estimada por los economistas y las consultoras privadas, debido a que la caída del consumo minorista (de hasta casi el 10% en algunos meses) generó mayor cautela de los comerciantes a la hora de subir los precios.
Héctor Polino, presidente de Consumidores Libres, señaló a ámbito.com que "las familias redujeron un 70% sus salidas de esparcimiento" en medio de la recesión y señaló que "esta baja fue la que contuvo el incremento de precios en esta categoría".
Por su parte, Miguel Calvete, titular del Instituto de Estudios de Consumo Masivo (Indecom), consideró a este medio que "en un panorama recesivo siempre el hilo se corta por lo más delgado, en este caso se resignaron salidas y demás servicios y productos asociados al entretenimiento".
A modo de referencia, el especialista indicó que el nivel de reservas para las Fiestas cayó un 32 % porque las familias optan por quinchos, Salón de Usos Múltiples (SUM) o casas particulares". Ese mismo porcentaje de baja se observó todo el año con respecto a la frecuencia de las salidas a comer afuera en restaurantes.
En este contexto, el precio de las entradas de fútbol para la tribuna popular trepó más de un 65% hasta los $ 200 durante el último año. Mientras que, los preservativos -también asociado al placer- subieron hasta un 55% y el turno en un hotel alojamiento promedia los $ 330 el turno, un 32% que a fines del año pasado.
Los "puchos" se prendieron fuego con alzas que llegaron hasta el 55% durante este año.
Mientras que las entradas al cine treparon un 35% a $ 165 en algunas cadenas y para una obra de teatro, un 25% hasta un precio promedio de $ 250.
La inflación también fue un golpe certero al estómago de los consumidores argentinos. El café con leche y dos medialunas, una costumbre bien argentina, trepó casi un 30%, al igual que el kilo de asado.
La pizza grande de muzzarella y la docena de empanadas, dos de los platos más preferidos de los argentinos, se encarecieron hasta un 25%. El precio de una milanesa con papas fritas, por su parte, creció un 50%.
Economía - en 2016
Martes 13 de Diciembre de 2016 - 15:56 hs
¿Cuánto se encareció darse un "gustito"?
Los precios de productos y servicios vinculados al esparcimientos tuvieron importantes subas en 2016, algunos inclusos por encima de la inflación. Por ello, muchas familias debieron resignar estos gastos. Relevamiento del alza de los "clásicos" a lo largo de este año.
Actualizado: Martes 13 de Diciembre de 2016 - 15:59 hs
Fuente: Ámbito