En diálogo con LT10, Horacio Roitman, titular de DAIA Santa Fe, contó que “durante la madrugada tiraron frente a una ventana de MACABI una botella con cemente que tenía una amenaza escrita en un papel. La advertencia decía que la próxima vez nos iban a tirar un explosivo y cerraba con la frase 'Dios es grande', escrita en castellano y en árabe. Esta frase es la que utilizan los terroristas antes de inmolarse o realizar un atentado”.
Roitman agregó que “nosotros sabemos diferenciar bromas de amenazas preocupantes. Esta advertencia nos preocupa mucho. En Paysandú y en Toulouse todos pensaban que no podía pasar nada y sin embargo ocurrió”.
A raíz de lo sucedido, Horacio Roitman y el presidente de Macabi, Diego Wulfsohn, mantuvieron por la tarde una reunión con el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Pablo Farías.
Luego del encuentro precisaron que el gobierno se comprometió a otorgar custodia las 24 horas "para preservar la integridad de las personas".
"Vamos a seguir en contacto con Seguridad y el Jefe de Policía", informó Wulfsohn, y negaron cualquier versión de zona liberada.
En tanto, remarcaron que "no sabemos cual es la dimensión pero vamos a tomar medidas como si la amenaza fuera máxima".
Por su parte, Farías mostró preocupación por lo sucedido y aseguró que “el hecho no es menor, fue preparado, premeditado. El ministerio de Seguridad está trabajando en el tema junto a la Policía Federal”.
También confirmó que se van a reforzar las medidas de seguridad en las instituciones judías de la ciudad.