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Las intensas intervenciones del Banco Central, sacrificando unos USD100 millones por día no logran evitar la sostenida depreciación del peso, porque cada vez los tenedores de dólares exigen más unidades de la moneda nacional.

En las primeras transacciones en el mercado de cambio se advierte que tanto el Banco Central como los operadores más avezados en el segmento libre decidieron elevar en dos centavos la paridad entre el peso y el dólar.

En el primer caso, el promedio de la City marca $9,378 para la compra y $9,487 para la venta a clientes, para el segmento minorista autorizado a adquirir billetes para ahorro. En tanto, en el canal mayorista, donde concurren principalmente exportadores e importadores, el punto de partida, antes de las retenciones u otros impuestos, se fija en $9,42 y $9,4225, para las dos puntas del mercado.

En línea con esos movimientos, en la franja libre los negocios se pactaron inicialmente con alza de dos centavos, pero intervenciones del Banco Central posibilitaron revertir la tendencia y bajar la cotización a $15,78 para la compra a clientes y $15,98 para la venta.

De mantenerse esos valores al cierre del día, septiembre finalizará con una devaluación nominal del peso en 1,4% para el Banco Central, mientras que para el mercado la depreciación se amplía a 3,3%. De ahí que la brecha cambiaria entre ambas cotizaciones aumentara de 65,3 a 68,4 por ciento.

En los mercados alternativos, como el de capitales, la paridad implícita en el "contado con liqui" cae siete centavos a $14,06; mientras que el MEP o Bolsa baja dos centavos, a $13,83, respecto del día anterior.

Menos reservas
Los datos definitivos de la posición de divisas de la autoridad monetaria correspondiente al 25 de septiembre indicaron una merma de USD239 millones, en contraste con una baja estimada inicialmente en USD37 millones. Descendieron así a 33.104 millones de dólares.

Semejante deterioro se explica por la conjunción de la sangría que provoca la persistente presencia vendedora en busca de estabilizar el mercado libre de cambio; las ventas autorizadas para ahorro, con menor cantidad por solicitante, pero con incremento respecto del mes previo, y la drástica caída del superávit de la balanza comercial. Además, se suman vencimientos de deuda pública, que en octubre insumirán casi 7.000 millones de dólares.