Los hechos se resumen así para Mariano Rajoy, presidente del Gobierno de España: "Me equivoqué al mantener la confianza en alguien que ahora sabemos que no la merecía; me engañó. Creí en su inocencia". Eran las nueve y media de la mañana del 1 de agosto cuando el jefe del Ejecutivo ha pronunciado por primera vez y en sede parlamentaria, el nombre del extesorero de su partido: Luis Bárcenas. Rajoy ha asegurado que nunca ha cobrado dinero de manera fraudulenta y, que en efecto, sí ha recibido sobresueldos, pero que todo lo ha declarado a Hacienda y eso, ha añadido, tiene más valor que "un renglón escrito al vuelo en un papel arrugado escrito a mano", en referencia a los manuscritos de Bárcenas . En su turno de intervención, tras escuchar al presidente, Alfredo Pérez Rubalcaba, secretario general del PSOE, ha declarado que no da crédito a nada de lo que acababa de decir Rajoy porque siguió amparando a Bárcenas y que no renunciará a la moción de censura. "
En un tono seguro, para entusiasmo de su grupo que le ha aplaudido constantemente, el presidente ha afirmado que confió en Bárcenas hasta que se supo que tenía cuentas ilegales en Suiza, aunque el último mensaje cruzado entre ambos se produjo cuando ya se conocía ese dato. "Esperaré a que la justicia acabe su trabajo", ha dicho el presidente en el pleno extraordinario en el Senado, convocado exclusivamente para tratar de la presunta financiación ilegal del PP y de presuntas percepciones irregulares del presidente. "La Justicia demostrará que nada ilegal ha habido ni en mi comportamiento ni en el de mi partido", ha dicho Rajoy.
No se ha colocado a la defensiva el presidente del Gobierno, sino que ha salido al ataque, contra todos los que no respetan "la presunción de inocencia" y los que hacen "un uso partidista" de este caso "poniendo en riesgo la estabilidad de España y jugando con el futuro de los españoles". Todas las bofetadas dialécticas se las ha llevado el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, que se ha permitido "amenazarle", según el presidente con una moción de censura. Rajoy ha abroncado a Rubalcaba por el uso de un intrumento constitucional para deslegitimarle. "No es serio, y no es que la tema. No me inquieta la moción de censura porque no saldría adelante".
Ahora bien, Rajoy ha reconocido el "daño" que la propia mención de una moción de censura ha hecho al prestigio de España. Se ha desprendido de la dureza que ha empleado en este asunto que el anuncio de moción de censura ha sido determinante para su comparecencia, aunque haya dicho que le ha movido el interés "de parar tanto despropósito". En efecto, ha concluido, "se ha hecho daño a la imagen de España".
La Justicia, la fe en la justicia, es en lo que cree el presidente. "Yo digo que lo que dice el señor Bárcenas no es verdad y a partir de ahí, solo cabe el juez. Esta es una Cámara parlamentaria y no un tribunal", ha dicho. "Hay quien quiere convertir el Parlamento en una enorme comisaría, decía un dirigente de este país". Y también: "Las Cortes no están para suplantar a los tribunales". Estas frases, aunque no ha citado su autor, son sin la menor duda de dirigentes socialistas. Otra frase de gran relevancia que es toda una declaración de principios: el Congreso está para demandar las responsabilidades políticas, pero "cuando los hechos resulten ciertos".
No le corresponde a Rajoy, demostrar su inocencia, sino que serán los tribunales los que tengan que demostrar los hechos y "las insidias de Bárcenas". "Esperaré a que concluya el proceso judicial en la confianza de que ni a mi partido nada habrá que acusarnos", ha recalcado. Apoyó a Luis Bárcenas, ha admitido, como apoyará a cualquiera que sufriera una persecución "injusta". A lo que ha apostillado: "Le apoyé hasta que cuatro años después confirmaron las cuentas millonarias en Suiza. Era una deslealtad con el partido y además era ilegal. Y ese ha sido mi papel en esta historia". Esto es todo lo que ha ocurrido para Mariano Rajoy.
Nada es cierto, ha proclamado Rajoy, que no ha caído en el "y tu más" en clara referencia al caso de los ERE de Andalucía. Solo queda esperar a la justicia que aclare el caso Bárcenas y tomar medidas anticorrupción, anunciadas hace seis meses y aún a la espera.
Nada hay ya hay que esperar para la oposición. “Usted ha venido aquí a intentar salvarse. Usted está haciendo daño a España y hoy le pido que se marche; le pido un gesto de generosidad con un país que no puede tener a un presidente como usted”. Este ha sido el broche de la intervención del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba tras la intervención del presidente del Gobierno. Le pidió la dimisión en el mes de febrero y hoy lo ha vuelto a hacer, porque “es un problema para España” .La historia que ha contado Alfredo Pérez Rubalcaba sobre el caso Bárcenas no coincide en absoluto con la que ha ofrecido Mariano Rajoy; para él, hay una “turbia relación del tesorero con el PP”, y del propio presidente. No descarta Rubalcaba la presentación de una moción de censura. Se verá, según el curso de los acontecimientos.
“Ustedes no dejaron caer a Bárcenas durante años porque no podían”, ha dicho Alfredo Pérez Rubalcaba en un relato muy diferente del realizado por Rajoy. Cuando el juez decreta la prisión de Bárcenas, los acontecimientos se precipitan. “Para ustedes empezó a ser un delincuente cuando pasó a no disimular su letra con los peritos calígrafos y cuando rompió el silencio y Don Luis Bárcenas pasó a ser un compañero de oficina con el que ustedes se cruzaban alguna vez en el ascensor”, ha interpretado el líder socialista. La opción no es creer a Bárcenas o a Rajoy, sino “entre la verdad y la mentira”. Lo que hay que discutir es “su relación durante veinte años”. Es imposible de creer que Rajoy “no supiera nada de la financiación ilegal del PP durante veinte años”. El nombre de Bárcenas se escribe con b de sobresueldos, con b de bochorno y con b de contabilidad b, ha encadenado Rubalcaba.
Los sms entre Mariano Rajoy y Luis Bárcenas son propios “de un socio con otro en apuros” o mejor, “los de un socio que puede poner a otro en apuros que se prolongan después de que se conociera la cuenta en Suiza”. Esos “afectuosos mensajes” que ponen de manifiesto la complicada relación de Bárcenas con la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal. “Luis, nada es fácil, hacemos lo que podamos”, rememora Rubalcaba. Mensajes que hablan de los sobresueldos respecto al que Bárcenas dice que “no puede contrarrestar la filtración de Cospedal a El Mundo”. Y no se acusa de “una mentira”, sino de una filtración. “Sé fuerte”, le dice Rajoy a Bárcenas. Concluye Rubalcaba este pasaje: “El tesorero infiel”.
Son los sms cruzados entre Mariano Rajoy y Luis Bárcenas el elemento más citado por los portavoces de la oposición para decir al presidente que la relación era demasiado estrecha como para creer al presidente que todas las irregularidades eran desconocidas para el presidente. Muy firme se ha mostrado el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida para quien este pleno es un auténtico desastre para la credibilidad de España pero las explicaciones del presidente "son insuficientes". Tiene que ser "más claro" para tratar de despejar las dudas que existían y se mantienen tras su intervención. Duran estima que entre todos tienen que contribuir a paliar "la notable fatiga política".
La crispación ha llegado con la intervención del portavoz de ICV, dentro de Izquierda Plural, Joan Coscubiela. "Este país no se merece tener un corruptor político al frente de la presidencia del Gobierno". Con estas palabras llegó el escándalo y el presidente del Congreso, Jesús Posada, le ha pedido que vigilara su lenguaje, entre gritos con insultos a Coscubiela procedentes de la bancada popular. "Sin su colaboración el delincuente Bárcenas no existiría", le ha dicho. "Dimita y convoque elecciones". Ya se lo había pedido el portavoz de IU, Cayo Lara. "Este debate no puede ser un pleno de punto y final; dimita y convoque elecciones, devuelva la voz al pueblo", le ha pedido Cayo Lara, portavoz de Izquierda Plural, que ha hecho un relato sobre todo el caso Bárcenas para concluir que la colaboración y la connivencia con Bárcenas ha sido constante hasta hace pocos meses. El tercer portavoz de Izquierda Plural, Chesus Yuste, ha insistido en la convocatoria de elecciones porque "de la mafia no se puede esperar nada".
Al Parlamento no se le controla desde la cárcel pero tampoco "desde el Gobierno", le ha recordado Rosa Díez, portavoz de UpyD. "Su comportamiento nos lleva a hacerle una rotunda moción de censura" , la he dicho Díez para quien el presidente "no ha dicho la verdad" porque ha negado sus errores políticos. "La mentira es su debilidad y eso no tiene perdón". Los hechos probados acorralan al Gobierno por la defensa que han hecho de Bárcenas durante muchos años y sobre tales no hay posibilidad de hacer distintas versiones. ¿ Puede afirmar que no hay contabilidad B en el PP?, le ha preguntado Díez que ha continuado con otra tanda de interrogantes. ¿ Puede afirmar que el PP ha respetado la ley de incompatibilidades en la percepción de sueldos?. El pago por parte del PP de los abogados de Bárcenas fue otra pregunta. Entre tanto, el presidente no tomaba ninguna nota. ¿ "Se reunió usted con el señor Bárcenas y el señor Arenas "?. Y continuó con otros interrogantes derivados de las declaraciones judiciales de Bárcenas. Y así, hasta veinte preguntas. “Rompa su silencio culposo o cómplice”, que para ella se traduce en que “asuma responsabilidades”.
A Rajoy le han traído a este debate “los bancos de inversión”, no los grupos parlamentarios. Esto le ha reconocido el portavoz del PNV, Aitor Esteban que ha empezado por reprocharle que presumiera de que la oposición no tenía mecanismos para traerle a la Cámara. “Por fin ha nombrado usted al señor Bárcenas”, ha resaltado Esteban. “Este caso es suyo, solo suyo, así que no vale que se extienda la mancha de financiación ilegal; no extienda la tinta del calamar”, le ha pedido el portavoz peneuvista para quien resulta “irritante” que se mencione otro cambio en la ley de financiación de partidos. La última la ha hecho el PP y ha llevado “a hacer EREs en las plantillas de los partidos”. Se preguntaba el PNV cómo el PP podía hacer frente a los gastos cuando los demás estaban ahogados. “Ahora nos lo explicamos y además quieren seguir cortándonos a los demás”. Después de este desahogo el portavoz peneuvista, como el resto de los portavoces, ha hecho el relato de la relación de Bárcenas con el PP y el propio Rajoy. Y de nuevo los sms cercanos y afectuosos de Rajoy hasta marzo de 2013. Los pagos B los cree demostrados a nivel nacional y en los ámbitos autonómicos. La pregunta de todos: “¿ Las cuentas de Suiza son solo de Bárcenas o esa contabilidad responde a recaudación de empresarios sin dar cuenta al Tribunal de Cuentas”?. No, todo está por despejar, según el portavoz peneuvista. Pero de momento, aunque da por seguro que no va a dimitir, le dice que "no tiene credibilidad" para exigir sacrificios a los españoles.
Jueves 01 de Agosto de 2013 - 10:23 hs
Rajoy solo admite su error con Bárcenas y rechaza todas las acusaciones contra el Partido Popular
Actualizado: Lunes 14 de Marzo de 2016 - 00:19 hs
Fuente: elpais.com