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Karina Jelinek sigue estando en el ojo de la tormenta tras el escándalo de la causa de supuesto lavado de dinero que involucra a su ex pareja, Leo Fariña. Mientras su ex pasea por los Tribunales, la infartante modelo se tomó unos días de vacaciones en Miami y allí debió desmentir versiones periodísticas que la involucraban con dos personas. Primero, un supuesto affaire con el abogado Fernando Burlando. Y ayer, puso el grito en el cielo cuando dijeron que sostenía una relación sentimental lésbica con su amiga del alma, Paz Cornú.

La infartante morocha enojada señaló: "Con Paz tenemos muchas cosas en común. Dijeron que tenía una historia con ella, ya no sé con quién más me van a relacionar. Somos muy amigas y nos llevamos bárbaro". La confusión saltó porque las dos viajaron juntas a las playas de Miami en plan de descanso y trabajo. Paz es diseñadora de ropa y Jelinek suele lucir sus prendas en las pasarelas.

Durante la separación, cuando Jorge Lanata en Periodismo Para Todos destapó el caso Báez involucrando a Fariña, Jelinek se mudó a la casa de Paz y allí durmieron juntas en la cama matrimonial de la modelo. Ahora viajaron juntas y se hospedaron en la misma habitación del hotel.

Las especulaciones están a la orden del día. En principio trascendió un supuesto romance con Burlando, quien habría asesorado a Fariña, y Jelinek. Horas después se desmintió la versión cuando fotografiaron al abogado mediático en compañía de una de las azafatas de A Todo o Nada (programa de Guido Kaczka por El Trece), Barby Franco. Jelinek aclaró que su amiga "está de novia con un polista que se llama Javier. Y Leo y yo nos llevamos muy bien con él. Ahora Paz y su novio están en Brasil por un casamiento", contó Ratingcero.com.ar.

La modelo pasa por varios estados de ánimo, entre enojada y cansada, y por primera vez se animó a disparar contra Jorge Lanata, el periodista que destapó el escándalo. "Inventan cualquier cosa, hasta Lanata dijo que yo estaba con Fernando Burlando. Se ve que Lanata no se quería perder este quilombo. Es terrible, pero la verdad es que Fernando vino a Miami por su cuenta y nos encontramos de casualidad".i