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El gobierno de San Luis aplicará un ajuste del gasto público que incluirá aumentos impositivos, aunque también la suspensión del aguinaldo y del incremento salarial para los funcionarios políticos.

La administración provincial garantizó, no obstante, que no se detendrá la obra pública y confirmó que los sueldos serán pagados normalmente.

Así lo anunció el ministro de Hacienda y Obras Públicas de esa provincia, José María Emer, quien argumentó que las medidas son producto de la “reducción” de la coparticipación, que estimó en “$ 140 millones en estos cinco meses de 2012”.

Se trata, dijo, de “un porcentaje importante en relación al crecimiento estimado” para las remesas que envía la Nación.

De todas formas, procuró llevar tranquilidad, ya que “la situación económica de la provincia es muy buena, como siempre”.

“Pero si miramos las noticias del país, no estamos en una buena situación económica a nivel nacional debido a que la coparticipación federal ha caído considerablemente en relación al crecimiento de los últimos años”, añadió

“Aún con esas restricciones, los sueldos se van a seguir pagando los últimos dos días de cada mes, como lo hemos hecho siempre”, manifestó.

“Además, no vamos a detener la obra pública por ningún motivo, San Luis va a seguir creciendo y vamos a seguir invirtiendo en obras públicas”, garantizó.

Entre las medidas de ahorro, adelantó la suspensión del pago de la cuota del aguinaldo de mitad de año para todos los funcionarios, desde el gobernador hasta el cargo de jefe de subprograma.

Este sector, dijo, tampoco cobrará en julio un aumento salarial de 7,5%, como estaba previsto.

Pero también, adelantó, el gobierno impulsará una modificación de la Ley Impositiva Anual, ya que cuando fue sancionada no se contempló aumentos en los gravámenes de ingresos brutos, inmobiliario, automotores, acoplados y motocicletas y a los sellos.